La alcaldesa de Barcelona ha anunciado este sábado en su perfil de Facebook que está embarazada de su segundo hijo. A sus 42 años asegura estar "muy feliz" con la llegada de este nuevo miembro a la familia. Colau y su pareja Adrià Alemany (37) ya son padres del pequeño Luca de cinco años, con el que se la ha visto en numerosos actos públicos.
Ha querido aprovechar este anuncio para reflexionar sobre lo que significa para ella la maternidad. "Cada mujer vive la maternidad a su manera, por suerte somos muchas y diversas. A mí ser madre me ha dado fuerza y me ha hecho muy feliz. Sin ninguna duda tener a Luca me ha hecho mejor persona, me ha ayudado a distinguir lo importante de lo banal y pasajero, a tener más empatía, a no dejarme llevar por pasiones tristes ni por sentimientos mezquinos", confiesa en Facebook. El bebé nacerá en primavera, ya que está de trece semanas. Un embarazo que espera llevar con normalidad y que no modificará su agenda como alcaldesa o eso espera.
"En los meses que vienen seguiré con mis obligaciones como alcaldesa con normalidad, una barriga creciente y aún más motivada para hacer de Barcelona una ciudad mejor, para los que ya estamos... y para los que vendrán”, anunciaba. Su primer hijo le coincidió en el momento más álgido de su activismo social. Colau reconoció haber vivido algún ataque de ansiedad fruto del estrés pero no quiso dejar de luchar y lo compaginó con la maternidad hasta el último momento. Ada ha sido fiel a sus convicciones. "Los sentimientos y las emociones son uno de los grandes problemas de nuestra sociedad porque no se muestran". A ella le gusta compartirlos con los demás, tanto en público como en privado. De ahí que haya compartido este momento de felicidad con todos sus seguidores.
La alcaldesa y su pareja llevan nueve años juntos. Ambos viven en un piso de menos de 90 metros cuadrados en el barrio de La Sagrera. Se conocieron cuando coincidieron en la organización ciudadana V de Vivienda. Ambos llegaron al Ayuntamiento de Barcelona de la mano de Bcomú, coalición de izquierdas que arrasó en las urnas. Él dejó un trabajo como asesor económico en la fundación del F.C Barcelona. Muchas fueron las voces críticas que acusaron a la activista antidesahucios de "enchufar" a su pareja. Ella salió al paso asegurando que no era ella sino la coalición política la que le había ofrecido el puesto de asesor en el ayuntamiento. Además de puntualizar que no iba a cobrar más de 2.200 euros, un sueldo muy por debajo de lo que cobraba en su anterior trabajo.
Siempre había dicho que le gustaría tener más hijos (ella fue hija única hasta que sus padres se divorciaron y su madre tuvo más hijos con su siguiente pareja). Pero que el trabajo le impedía ejercer de madre como a ella le gustaría. "Además de la maternidad no hay en la vida nada más maravilloso que transformar la realidad y mejorarla", reivindica. El pequeño Luca ha crecido entre asambleas de 'Afectados por la hipoteca', protestas y manifestaciones. La primera frase completa que pronunció fue "Mamá, papá, sí se puede". Ahora hay otro futuro activista en camino al que contagiar.