José Luís Martínez-Almeida tiene nueva familia. Su ahora esposa, Teresa Urquijo, tiene un hermano, Juan Urquijo, y es hija de Lucas Urquijo Fernández y Beatriz Moreno y de Borbón, dos miembros de la alta sociedad de la capital española, una por tradición empresarial y mucho dinero y la otra por tener sangre azul corriendo por sus venas.

La madre de la novia, Beatriz Moreno Borbón, es hija del marqués de Laserna, Iñigo Moreno Arteaga y de Teresa de Borbón-Dos Sicilias y Borbón-Parma, prima hermana del Rey Juan Carlos. Eso significa que su abuela, la mencionada Teresa de Borbón, es hija de Alfonso de Borbón, sobrina nieta de Alfonso XIII y bisnieta de Alfonso XII. Esto hace que emparenten también con la Reina Sofía, ya que tienen lazos con las casas reales de Habsburgo y de Austria.

La abuela materna de Teresa es hermana de Carlos de Borbón-Dos Sicilias, el fallecido Infante de España a quien el padre de Felipe VI consideraba casi su hermano, ya que compartieron parte de su adolescencia en la finca Las Jarillas, cuando el Emérito llegó a España para ponerse a disposición de Franco. Fue él quien le ‘regaló’ el título de Infanta y permitió que sus restos fueran enterrados en el Monasterio de El Escorial, privilegio reservado solo para los hijos de los Reyes españoles. Así que toda la rama española de la Casa Dos Sicilias, encabezados por Pedro de Borbón, duque de Calabria, ha estado presente en el enlace.

Fuentes cercanas al rey emérito, Juan Carlos I, han asegurado a este periódico que el monarca ha tardado mucho en tomar esta decisión de pisar Madrid por tercera vez desde que vive en Abu Dabi, y que ha avisado a los novios hace tan solo unos días.

La razón no es su situación de ‘exiliado’, sino porque no se trata solo de un enlace familiar -también es un enlace político-, ya que el novio es del Partido Popular. Y fue precisamente esta, el huir de la utilización política de su figura para dañar a la Corona una de las razones que le llevó a abandonar el país.

Pero ahora, con todas sus causas judiciales pendientes cerradas no encontró ninguna razón de peso para rechazar la invitación. "Lo ha pensado mucho, pero lo cierto es que nada le impide pisar España tranquilamente y donde quiera. Lo que hará será lo que hizo la última vez que estuvo en la capital española: pasar el día y no dormir. Todavía no ha decidido si se volverá a Abu Dabi o tomará rumbo a Galicia para pasar allí unos días cuando termine el banquete en Colmenar Viejo", cuenta a EL ESPAÑOL una fuente cercana al Emérito. 

Teresa Urquijo lucía un clásico vestido blanco con sumo detalle. De corte recto, con velo de tul ilusión de seda, manga abullonada y una larga cola de casi tres metros. Sin embargo, este vestido tiene una historia familiar que se remonta a hace exactamente 63 años, en concreto, al 6 de abril de 1961.

Ese mismo traje -ahora remodelado- fue el que llevó su abuela, Teresa de Borbón, en su enlace matrimonial, y realizado por el diseñador Pedro Rodríguez -gran amigo de Balenciaga-. Beatriz Moreno de Borbón-Dos Sicilias, madre de la novia, también lo lució cuando se casó, en junio de 1995, con el hombre de su vida, Lucas Urquijo Fernández de Araoz.

Ahora, la nieta ha continuado con la tradición familiar. Ha sido el atelier de la diseñadora Cristina Martínez-Pardo Cobián, más conocida como Cristina Navascués, familiar, a su vez, de Martínez-Almeida, el encargado de rediseñar un nuevo modelo nupcial con la misma tela.

La exministra de Igualdad y militante de Podemos, Irene Montero, ha cargado a través de un video de TikTok contra la boda del alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida con Teresa Urquijo por ser una suerte de espectáculo trilero: "Mientras hablamos de la boda de Almeida no hablamos de que privatizan tus derechos para poder robar".

Montero, en una grabación de casi tres minutos, ha asegurado que el Partido Popular "ha puesto a Telemadrid, la televisión pública, pagada con dinero de todos los madrileños y madrileñas, a contarnos todos los detalles en vivo y en directo", para 'distraer' de escándalos que pudieran estar salpicando al partido.

Ha arremetido contra "todo el poder mediatico de la derecha", en sus propias palabras, y ha afirmado que la razón para contar los detalles del evento es "porque esta boda, antes de una boda, es una demostración de poder. Nos quieren decir alto y claro aquí están los que mandan. Los que nos juntamos en las bodas, en reuniones en cenas de forma cotidiana, políticos, empresarios, gentes que mandamos".

José Luis Martínez-Almeida y Teresa Urquijo están celebrando su compromiso en la finca El canto de la cruz, en Colmenar Viejo. La finca es propiedad de Teresa de Borbón-Dos Sicilias y Borbón, abuela materna de Teresa y prima del rey Juan Carlos I.

La finca fue adquirida en 1991 por Teresa de Borbón-Dos Sicilias y su marido, Iñigo Moreno de Arteaga. Los marqueses de Laserna construyeron allí una casa, que es en la que residen. La finca consta de 25 hectáreas y cuenta con su propia yeguada llamada Flor de Lis.

Se llama Joaquín Fernández Prats y es el sastre y propietario de la tienda-boutique Fernández Prats. Él ha sido el encargado de vestir al alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, el día de su boda.

Su tienda y taller se encuentran en la calle Hermanos Pinzón, 4, en El Viso. Además, cuenta con una pequeña boutique dentro del Hotel Wellington, en la calle Velázquez. Sus diseños combinan la buena hechura de los ingleses y la modernidad de los italianos. 

Se llama Carmen Fernández de Araoz, aunque en los círculos de sociedad se la conoce como Piru Urquijo. Es la abuela paterna de Teresa Urquijo, ya esposa de José Luis Martínez-Almeida.

La aristócrata reside en el Barrio de Salamanca, en las inmediaciones de la iglesia de los Jesuitas. Contrajo matrimonio en 1957 con Jaime Urquijo y Chacón, en San Francisco ‘El Grande’. Vivieron juntos 62 años, hasta que él falleció en 2019. Quien la llevó al altar fue su abuelo, el prestigioso médico Gregorio Marañón.

La presidenta madrileña ha acudido a la boda del alcalde de Madrid sin su pareja, Alberto González Amador. Ha llegado a la iglesia de San Francisco de Borja en el coche institucional de la Comunidad de Madrid.

Isabel Díaz Ayuso ha escogido para la ocasión un vestido largo, fucsia, de lunares, con un escote asimétrico. Y lo ha acompañado con unos zapatos stilettos negros a juego con su bolso y un discreto tocado con el pelo recogido en un moño.

El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha llegado al altar acompañado, además de por su hermana Casilda, por la música de Bochherini y pasacalles de Madrid. Una vez finalizada la ceremonia, ha sonado la canción ‘Madre’ del grupo Hakuna.

Parte de la letra dice lo siguiente: Llévame contigo / A todos lados / Que pueda dormir tranquilo /  Bajo tu precioso manto. / Y llévame contigo / Y no me sueltes de la mano / Y que cuando sienta frío / Note tu cálido abrazo.

Una pequeño grupo de personas se han concentrado en las inmediaciones de la finca El Canto de la Cruz de Colmenar Viejo, en Madrid, donde se celebra el almuerzo posterior a la boda del alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, y Teresa Urquijo.

Los recién casados y los invitados están degustando un menú que ha costado 175 euros por personas. El servicio corre a cargo de uno de los restaurantes más emblemáticos y con más tradición de Madrid: Lhardy.

Dicho menú está compuesto por un cóctel con seis variedades más un primero, un segundo y un postre. Ya, cuando llegue la noche, se servirá una recena.

La boda de Almeida y Teresa Urquijo ha estado repleta de guiños a Madrid y a las tradiciones más castizas, aprovechando que el novio es el alcalde de la ciudad. El primer detalle madrileño que se ha podido apreciar ha sido con la llegada del alcalde, media hora antes de la celebración, a la iglesia San Francisco de Borja de la calle Serrano. 

El rey emérito Juan Carlos I (86 años) era uno de los invitados más esperados a la boda del alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, y Teresa Urquijo. Muestra de ello ha sido la estruendosa ovación que ha recibido de los curiosos que se concentraban en las inmediaciones de la iglesia de San Francisco de Borja, donde ha tenido lugar la ceremonia.

La reina Sofía acaba de llegar a la finca El Canto de la Cruz, en Colmenar Viejo, donde se celebra a estas horas el banquete de la boda de José Luis Martínez-Almeida y Teresa Urquijo. La monarca no ha acudido a la ceremonia religiosa, como si han hecho el emérito Juan Carlos, las infantas Cristina y Elena, y sus nietos Froilán, Victoria Federica y Juan Urdangarin, y ha decido ir directamente al convite.

Pablo, sobrino del alcalde de Madrid -hijo de su hermana Magdalena y de padre belga-, ha asegurado que la ceremonia ha sido "muy emocionante", en declaraciones a la prensa a su salida de la iglesia. "Todo ha sido tan bonito, pero diría que la chica que ha cantado al final Madre, una canción de la virgen, me ha emocionado mucho", ha dicho el sobrino, quien ha asegurado que Almeida ha llorado a la entrada de Teresa Urquijo a la iglesia. 

En cuanto al convite, desconoce si los novios les esperan ya allí: "Todo son sorpresas". "Pero lo más importante es que mi tío y teresa sean muy felices y les deseamos lo mejor", ha finalizado.

Informa Raúl Rodríguez. 

A la ceremonia han asistido varios dirigentes del Partido Popular. Entre ellos, la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, y el presidente de Galicia, Alfonso Rueda, el de Murcia, Fernando López Miras, o el de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco.

La expresidenta de la Comunidad de Madrid Esperanza Aguirre ha respondido a preguntas de los medios de comunicación a su salida de la iglesia. La popular no ha podido confirmar si los novios han llorado durante la ceremonia, pues se encontraba, como ha dicho, detrás de ellos. En concreto, en la segunda fila. Sin embargo, si ha señalado que la música de la ceremonia era muy "bonita".

Sobre el rey emérito, Aguirre ha explicado que estaba sentado con la madre de la novia y junto a sus hijas, las infantas Cristina y Elena.

Después de los novios y la Familia Real, los siguientes en salir de la iglesia ha sido la familia de Teresa Urquijo. A continuación, les han seguido el resto de invitados, que salen en masa rumbo a la finca El canto de la cruz, donde tendrá lugar el convite.

Informa Raúl Rodríguez.

Todos los miembros de la Familia Real que han acudido a la ceremonia, el rey Juan Carlos, la infanta Elena, junto a sus hijos, Froilán y Victoria Federica, la infanta Cristina, y su hijo mayor, Juan Urdangarin, posan juntos a la salida de la misa.