Como un trabajador cualquiera. Así es como se refieren a la infanta Cristina desde La Caixa. La hermana del rey Felipe VI se encuentra en Barcelona desde el martes para asistir a reuniones y desempeñar su labor al frente del Área Internacional de La Obra Social La Caixa. Una cuestión que desde la entidad califican de "normal".
No es la primera vez que Cristina de Borbón pisa la capital catalana desde que terminaran las vacaciones de verano. Como un trabajador cualquiera, insisten, se ha incorporado al trabajo cuya sede está en Ginebra aunque debe visitar Barcelona varias veces al mes.
Mucho se ha especulado sobre la vida de la infanta. Unos pusieron hasta número a la calle de Lisboa en la que tenía su nueva residencia. Otros prefirieron apuntar a Barcelona y llegaron a asegurar que sus hijos volverían al Liceo Francés. Y su casa estaría delante del Consulado de Rusia en avenida Pearson. Desde su círculo íntimo se desmentía.
Nada nuevo, insisten quienes la conocen: la infanta quiere seguir la vida rutinaria y normal. Es lo poco a lo que puede agarrarse por el momento. Los cambios llegarán, lo aseguran quienes conocen el Caso Nóos, que no dudan en asegurar que Iñaki Urdangarin deberá ingresar en prisión (el Fiscal reclama una pena de 19,5 años de cárcel). Así que mientras esos cambios no se producen, la normalidad es un bien muy preciado por el matrimonio.
Y dentro de esa normalidad, alojarse en el AC Victoria Suites, de Marriot, en la calle Bertrán y Rózpide, es lo habitual. Desde el garaje de este aparthotel sale cada mañana rumbo a La Caixa, donde la han visto entrar estos días. "No se esconde", aseguran desde su círculo, "porque todo es tan normal que no necesita pasar desapercibida".
Dentro de esta normalidad, no obstante, no ha cabido la posibilidad de tomarle una fotografía. No hasta la fecha, al menos. Y eso que hay algún que otro paparazzi apostado delante del Marriot cada día. También en las cercanías de La Caixa y en la calle Aribau, donde está el bufete de Miquel Roca. Porque se supone que en algún momento la infanta deberá reunirse con sus abogados.
La sentencia del Caso Nóos, lo contamos en JALEOS, está al caer. "Como muy tarde debería publicarse en diciembre", comentan fuentes judiciales. Pero la presencia de la infanta en Barcelona estos días nada tiene que ver con el Caso Nóos, el que posiblemente rompa esa normalidad que tanto codician ahora los Urdangarin de Borbón.