Ya es Navidad en Buckingham. La familia real británica es gran amante de estas mágicas fechas y dedicará casi un mes a festejarlas. Este miércoles se han iniciado los actos navideños en la casa Windsor con la tradicional comida en el palacio de la reina Isabel II (91). La monarca, además, ha hecho este año una gran excepción en su metódica organización del banquete, y es que ha invitado a Meghan Markle (36) a pesar de que siempre ha prohibido la asistencia a las parejas de los miembros reales no casados.
La prometida del príncipe Harry (33) ha conseguido pasar el veto de la reina madre y ser la invitada más esperada por los medios de comunicación que se agolpaban a la entrada de Buckingham. En cuanto el Land Rover del futuro matrimonio se adentró en las inmediaciones de palacio, los flashes de las cámaras inundaron el perímetro del coche.
En el interior, la pareja parecía ir hablando. Meghan ha escogido un estilismo en colores blanco y negro con un bordado muy especial en la parte de los hombros y con cuello cerrado. El maquillaje y el peinado son muy naturales, aunque ha querido poner un toque de brillo en sus labios con un gloss sobre un tono rosa claro que endulzaba su rostro.
Frente al semblante 'concentrado' de la actriz estaba la gran sonrisa de Kate Middleton (35) que llegaba a la cita junto a su familia y saludando a la gente de fuera desde el asiento del copiloto. Su marido, el príncipe Guillermo (35), conducía el vehículo y en la parte trasera iban sentados los pequeños, George (3) y Charlotte (2), junto a su nanny española, Teresa Turrión.
La duquesa de Cambridge, quien según varios diarios americanos ha ayudado a Meghan con el protocolo real, verá cómo la actriz forma parte de la Navidad de los Windsor con un privilegio que no tuvo ella. Y es que Middleton solo asistió a los actos navideños una vez se casó con el hijo mayor de Carlos de Inglaterra (69).
La inmersión de Markle en la realeza inglesa se está fraguando a gran velocidad. En este otoño se han dado todos los pasos para la confirmación de su relación con el nieto de Isabel II, desde su primera aparición juntos el 23 de septiembre hasta la pedida de mano oficial y la fecha de la boda para el 19 de mayo. El mayor de los pasos se está dando estos días con la asistencia de la actriz de Hollywood a las citas navideñas, un hecho que reafirma el compromiso de la veterana reina en dar la bienvenida a la futura mujer de Harry.