Carla Vigo Ortiz (18 años), la sobrina de la reina Letizia (46), ha querido homenajear a su madre fallecida a través de sus redes sociales. En la publicación aparece la joven estudiante de niña con un vestido de flores junto a una sonriente Érika Ortiz que abraza a la pequeña.
La prima de la princesa Leonor (13) ha acompañado esta tierna publicación junto al mensaje: "Bella flor" y un emoticono de un corazón rosa.
La muerte de Érika en febrero de 2007 en su domicilio en Valdebernardo fue un duro golpe para la familia, y especialmente para su hija que en ese momento tenía 7 años. Desde entonces, la joven Carla no ha dejado de recordar a su madre, tanto en privado como en público.
Una de estos últimos homenajes tuvo lugar el pasado 7 de febrero, cuando se cumplía el aniversario de su muerte. La estudiante publicó de nuevo en Instagram una carta dedicada a su madre:
"A veces pienso qué te hicieron, yo sé que no eras tú y que si hubiese sido por ti no hubiese cambiado nada. El hecho es que cambió y yo pienso en ti todos los días y aunque a veces llore, pienso en ti de una forma alegre, en nuestros viajes, etc...", comienza el mensaje.
Y prosigue, "fue breve, sí, pero también fue intenso y vaya si fue intenso... Nos pasaron más cosas en seis años que a alguien en toda una vida", aludiendo, de alguna manera, a que sin haberlo planeado pasaron de ser una familia convencional a formar parte de la Familia Real española.
Como conclusión, Carla señala que "hoy es un día triste para mí y te juro que sé que no te gusta verme triste y yo no lo estaría pero a veces pasa... Los humanos somos así. Te quiero".
Otro de estos emotivos recuerdos tuvo lugar el 16 de abril de 2018, cuando su madre habría celebrado su cumpleaños. En esta ocasión, la estudiante escribió un mensaje a través de Twitter: "El 16 de abril de 1976 nació la persona más importante para mí aunque el 7 de febrero de 2007 dejó este mundo para pasar a mejor vida, estés donde estés siempre te querré y felicidades mamá".
El 7 de febrero del año 2007 el cuerpo sin vida de Érika fue hallado en extrañas circunstancias en su domicilio del barrio de Valdebernardo, en Madrid, mismo piso donde residió Letizia hasta su compromiso con Felipe de Borbón (51).
Según confirmaron fuentes oficiales, Érika Ortiz se encontraba sola en casa aquella mañana. Algunos amigos y conocidos la intentaron llamar a su teléfono sin hallar respuesta. Fue en torno a las 11 de la mañana cuando su cadáver fue encontrado por su entonces pareja sentimental. La noticia no solo conmovió a la familia Ortiz Rocasolano sino también a los Borbón y Grecia, que no dudaron en anular cualquier tipo de compromiso institucional en Agenda Real para acompañar a Letizia en uno de los momentos más duros de su vida.
La entonces princesa de Asturias, que se encontraba embarazada de su segunda hija, decidió acercarse a los medios de comunicación bajo la lluvia para agradecer su presencia: "Solo quería dar las gracias a todas las personas que se han sentido apenadas por la muerte de mi hermana pequeña", expresaba Letizia.
[Más información: La conmovedora carta de la sobrina de Letizia a su madre, Érika Ortiz, en el aniversario de su muerte]