Como todos los españoles, Letizia (47 años) disfrutará de su puente de la Constitución, así que este jueves hemos tenido el último acto de esta semana corta y un poco rara. Todavía estamos intentando digerir el vestido de Hugo Boss de flecos que llevo en los premios de ABC.
La Reina ha estado en Granada, disfrutando de La Alhambra porque, aunque haya ido a trabajar e inaugurar la exposición La Granada Zirí y el universo bereber, lo cierto es que a esta ciudad andaluza siempre se va a disfrutar.
De hecho la Reina ha dado un pequeño paseo por los alrededores saludando a las muchas personas que querían hacerse una foto con ella.
Para este acto, la esposa de Felipe VI (51) ha elegido un look tranquilo, tal vez pensando en que ya dio mucho que hablar el pasado martes. Se trata de un traje de dos piezas realizado en cheviot azul y bordado a mano con hilo, compuesto por una falda de vuelo y una chaqueta superentallada gracias a un cinturón.
Se trata de una creación de Felipe Varela, modisto del que hacía muchos meses que no se vestía para un trabajo de diario, parecía reservar las 'valeradas' para las citas importantes, pero parece que este jueves ha hecho una excepción.
La Reina estrenó este outfit el Día de la Hispanidad de 2017 y lo ha repetido en un número cansino de ocasiones, entre ellas cuando su hija Leonor (14) debutó en público el año pasado al leer el primer artículo de la Constitución española, con motivo del aniversario de la Carta Magna. Es decir, este viernes hará justo un año.
Además, es que casi siempre lo combina con los mimos complementos, por lo que el tema está ya más que aprendido. Lo luce con unos salones de ante azul y una cartera a juego, ambas cosas de la marca española Magrit.
Tampoco es novedad si os contamos que ha llevado el anillo de Karen Hallam. Para este jueves Letizia ha elegido los pendientes de Bvlgari que tanto nos gustan pero ha dejado sólo la parte superior de la pieza, el aro en oro blanco y diamantes, dejando en Zarzuela la gran aguamarina que suelen colgar de ellos.
Letizia se ha dejado la melena suelta y ha llevado un ligero maquillaje. Es decir, igual de aburrido todo que el propio look. Esperemos que la Reina disfrute de un tranquilo puente y tengamos una siguiente semana llena de estilismos comentables.
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