Esta semana está siendo muy especial para los duques de Sussex, Meghan Markle (38 años) y el príncipe Harry (35). Si bien el pasado miércoles Archie (1), el hijo en común del matrimonio, cumplía un año con un discreto aunque emotivo festejo, ahora han visto la luz las imágenes de la espectacular mansión en la que han decidido vivir Meghan y el nieto de Isabel II (94).
Con todo tipo de comodidades y servicio, la casa está situada en una de las zonas más lujosas de Los Ángeles, Beverly Hills. En un enclave de ensueño sobre una colina, la mansión, perteneciente al magnate de Hollywood Tyler Perry (50), dispone de 8 habitaciones, 12 baños y una gran parcela con piscina desde la que se puede ver las magníficas vistas de la ciudad.
Tal y como desliza Daily Mail, el nuevo hogar de los Sussex está valorado en 16 millones de euros y Beverly Ridge, la zona donde se encuentra la casa, tiene vigilancia y cuenta con su propio equipo de seguridad. De momento, se desconoce en calidad de qué están viviendo Meghan y Harry en la mansión, si como meros invitados de cortesía o a través del desembolso de un alquiler.
Además, la residencia está muy cerca del aeropuerto privado Van Nuys y de los colegios más exclusivos del oeste de Los Ángeles. No en vano, Harry y Meghan tienen multitud de vecinos millonarios. Por ejemplo, Paris Hilton (39) ha estado viviendo en la zona durante una larga temporada.
Si bien es cierto que, hasta la fecha, no existen imágenes de los duques juntos al magnate Perry, el citado medio inglés apunta a que fue la presentadora de televisión Oprah Winfrey (66) la que presentó a ambas partes. Y es que, Oprah es íntima amiga tanto de Markle como de Tyler.
Cumpleaños y máxima privacidad
El 6 de mayo de 2019 nacía Archie Harrison Mountbatten-Windsor Markle, y en un año ha vivido más acontecimientos y cambios de domicilio, que cualquier niño de su edad. El pequeño venía a colmar la felicidad del príncipe Harry y Meghan Markle tras una espectacular boda de la que fueron testigo 300 millones de personas en el planeta. Ambos, no podían ocultar su máxima felicidad con la llegada al mundo de su primogénito. Sin embargo, las apariciones del bebé han sido escasas.
A Archie solo se le ha podido ver en el día de su presentación en sociedad en el castillo de Windsor, en su bautizo, en su viaje por África -durante la reunión mantenida con Desmond Tutu, sacerdote y Premio Nóbel de la Paz- y en la famosa felicitación de Navidad de los duques de Sussex en Instagram. La decisión de preservar su intimidad como familia ha llegado a los límites de abandonar el seno de la Familia Real británica e instalarse en Canadá, lejos del foco mediático y de la presión de lo que supone pertenecer a una Casa Real.
La presión fue tal, que la pareja prefería vivir en un clima más tranquilo, donde las declaraciones de la familia paterna de Meghan no ayudaron mucho. Aunque fue muy bien acogida por los ingleses en un principio, al cabo de los meses, tuvo que ver como salían multitud de titulares que atentaban contra su persona. Por ello, entre otras muchas cosas, han decidido contar su verdad en una biografía autorizada que verá la luz muy pronto.
Sea como sea, el matrimonio no se van a desligar de su faceta solidaria, y como reputados benefactores, lo primero que han hecho ha sido crear la fundación Archewel, cuyo nombre está fuertemente vinculado al de su hijo. De hecho, Harry y Meghan han aprovechado el primer aniversario de su pequeño para seguir demostrando su altruismo. Han publicado un vídeo en colaboración con la filial británica de la ONG Save the children en el que se puede ver a la duquesa de Sussex leyendo el cuento infantil Duck! Rabbit! junto a su hijo.
Tal y como se puede ver en las imágenes facilitadas por Casa Real, Archie fue el protagonista del día de su cumpleaños y estuvo colmado de mimos por sus padres, quienes han hecho historia en la Familia Real británica para preservar, precisamente, el anonimato y el normal crecimiento de su pequeño.
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