En el más absoluto secreto. Así se ha casado el primo de Felipe VI (52 años), Felipe de Grecia (34) con Nina Flohr (33). La ceremonia tuvo lugar este sábado 12 de diciembre en Saint Moritz (Suiza), a las 11 horas. Los únicos testigos de este enlace civil fueron el exrey Constantino II de Grecia (80), padre del novio, y Thomar Flohr (60), padre de la novia, tal y como exigen las leyes del país helvético.
La noticia ha trascendido a través de un comunicado enviado a la prensa por la secretaría del que fuera Rey de los Helenos, en el que especificaba que en el futuro habrá un enlace religioso cuyos detalles se conocerán "a su debido tiempo".
Felipe y Nina llevaban años de relación pero su discreción evitó que se convirtieran en protagonistas de la prensa del corazón europea. Ella es hija de Thomas Flohr conocido empresario suizo, dueño de la compañía aérea VistaJet y de Katherine Flohr (58) que fue directora creativa de Fabergé y editora de la edición rusa de Vogue.
De la Familia Real española sólo han acudido la Infanta Cristina (55) y su hija Irene (15). La reina emérita Sofía (82) es la hermana mayor de Constantino y la Familia Real helena durante años pasaba muchas temporadas en España, después de que un referéndum les enviara al exilio. En concreto, Irene (78), hermana de Sofía y Constantino, vive desde 1981 en el Palacio de la Zarzuela.
Lo cierto es que desde hace años es conocida la frialdad que preside las relaciones entre los primos Grecia, como se les conoce en Zarzuela, y el rey Felipe VI y, especialmente, la reina Letizia (48). Una lejanía que también ha afectado a la única española asistente, la Ifanta Cristina, desde que el Caso Noos acabará con su marido, Iñaki Urdangarín (52) en prisión.
La ruptura entre los monarcas españoles y los destronados helenos se hizo evidente para el público después de las críticas de Marie-Chantal Miller (52), esposa del príncipe Pablo (53), a la reina de España después de la escena de manotazos que protagonizó durante la misa de Pascua en la catedral de Palma de Mallorca en 2018.
Tras esta boda, a los exreyes de Grecia sólo les queda un descendiente sin casar: Teodora (37) que se dedica al mundo de la interpretación. Lo cierto es que a pesar de las dificultades del exilio, Constantino y su mujer, Ana María de Dinamarca (74) han visto cómo sus hijos se han casado con personas que han mejorado sustancialmente la economía de la familia. Su hija mayor Alexia (55) lo hizo con el arquitecto canario Carlos Morales (50) que ha tenido varios problemas con la justicia.
Pablo, heredero al inexistente trono de Grecia, lo hizo con Marie-Chantal Miller, hija del creador de las famosas tiendas Duty Free Shop, Robert W. Miller (87). Nicolás (51) se unió con la empresaria venezolana Tatiana Blatnik. Esta boda, celebrada en 2010, supuso la vuelta, momentáneamente de la familia al país en el que habían reinado. Desde 1994 los miembros de la familia pueden volver al país tras la renuncia de Constantino a sus pretensiones de reinstaurar la monarquía en el país. Sin embargo, la boda de Nicolás recibió críticas por considerar algunos partidos de izquierda que se estaba haciendo propaganda monárquica convirtiéndose en un acto en favor de Constantino.
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