El príncipe Guillermo de Inglaterra (39 años) ha roto su silencio después de las durísimas palabras que su hermano pequeño, el príncipe Harry (36), y la esposa de éste, Meghan Markle (39), le dedicaron en la entrevista que concedieron a Oprah Winfrey (69) el pasado domingo.
El duque de Cambridge ha asistido junto a su esposa, Kate Middleton (39), este jueves por la mañana a una escuela en el este de Londres para promover un programa de salud mental para niños. Ha sido ahí donde se ha mostrado tajante y donde, según los medios británicos, ha manifestado cierto enfadado al afirmar que la familia real, la suya, no es una familia racista.
"No somos una familia para nada racista", ha espetado el primogénito del príncipe Carlos (71) en relación a la afirmación de Markle, con la que sostuvo que hubo un miembro de la familia real británica que mostró "preocupación" por si el color de la piel de Archie (1) era demasiado oscuro cuando naciera. En esos pequeños segundos de conversación con la prensa el duque de Cambridge también ha sido preguntado por si ha hablado con su hermano Harry después de la entrevista. "No, todavía no he hablado con él, pero lo haré", ha concluido.
El experto en familia real Phil Dampier ha elogiado la intervención del príncipe Guillermo tuiteando lo siguiente: "Claramente está muy herido, pero digno. Bien dicho, William". Los duques de Cambridge fueron directamente señalados por los duques de Sussex en su histórica conversación con Oprah Winfrey. Sobre su hermano mayor, Harry comentó sentir "compasión" y "pena" porque está atrapado en una institución de la que no puede escapar -cabe recordar que tanto Carlos como Guillermo están llamados a ser rey de Inglaterra-.
Meghan Markle, además, recordó que Kate Middleton la hizo llorar por los vestidos de las damas de honor de su propia boda. "Me hizo llorar. Fue ella la que me hizo llorar a mí y no al revés. Después me mandó flores y se disculpó", relataba Markle.
Estas palabras del duque de Cambridge se suman a las de la reina Isabel II de Inglaterra (94) de este martes. Con un comunicado desde el palacio de Buckingham la longeva soberana admitió que toda la familia estaba "entristecida" tras la entrevista de los duques de Sussex para la CBS.
El comunicado decía lo siguiente: "Toda la familia está entristecida al conocer el alcance total de cuán difíciles han sido los últimos años para Harry y Meghan. Las cuestiones planteadas, especialmente la racial, son preocupantes. Si bien algunos recuerdos pueden variar, (estos problemas) van a ser tomados muy en serio y la familia se ocupará de ellos en privado. Harry, Meghan y Archie siempre serán miembros muy queridos de la familia".
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