El príncipe Alberto II de Mónaco (63 años) opinó este viernes que los duques de Sussex, el príncipe Harry de Inglaterra (36) y Meghan Markle (39), deberían haber expresado su "descontento" con la familia real británica "en el entorno de la intimidad familiar".

En declaraciones a la BBC, el jefe del Estado monegasco aludió a la controvertida entrevista que la pareja concedió a la popular periodista Oprah Winfrey (69) en la televisión estadounidense, y que fue también emitida el pasado día 8 en el Reino Unido.

En ella, la duquesa de Sussex aseguró que ciertos miembros de la familia real británica expresaron dudas sobre el color de piel que tendría su primer hijo, Archie Harrison Mountbatten-Windsor (1), y reveló que durante ese embarazo tuvo pensamientos suicidas, acusando a la Casa Real de haberle negado ayuda en lo relativo a su salud mental.

Por su parte, el hijo de Lady Di lamentó el deterioro de su relación tanto con su hermano, el príncipe Guillermo (39), como con su padre, Carlos de Inglaterra (72), de quien dijo que le había "decepcionado".

Aunque reconoció que "es difícil ponerse en el lugar de otras personas", el príncipe Alberto II de Mónaco ha admitido este viernes que la entrevista le pareció "inapropiada". "Creo que este tipo de exposición pública de descontento, este tipo de conversaciones, deberían mantenerse dentro de la intimidad de la familia", ha afirmado.

El jefe del Estado monegasco consideró que "realmente, no es necesario exponerlo (en relación al malestar de los duques con la Casa real británica) en la esfera pública de esta manera". "Así que sí me molestó un poco, puedo comprender su postura de alguna manera pero creo que no fue el foro apropiado para poder mantener este tipo de conversaciones", ha reconocido.

En un mensaje al príncipe Harry, Alberto II de Mónaco aseguró que le "desea lo mejor". "Este es un mundo difícil y confío en que tenga buen juicio y sabiduría para tomar las decisiones correctas", concluyó.

El inicio de la relación de los duques de Sussex fue un acontecimiento para el mundo. Su pedida de matrimonio provocó, también, que personalidades de la talla de Alberto de Mónaco opinasen al respecto por la llegada de una actriz americana a la vida de los royals británicos. En 2017, cuando Meghan aún era sólo novia del príncipe Harry, el hijo de Rainiero de Mónaco quiso dar algunos consejos a la futura duquesa teniendo en cuenta que su madre, Grace Kelly, también fue una actriz que irrumpió fuertemente en una poderosa casa real europea.

"Antes o después, va a tener que enfrentarse a la gran ofensiva. En cierta manera, ser una actriz te prepara un poco, pero nada puede prepararte realmente para soportar esa presión de manera constante. Es difícil para cualquiera manejarlo", declaró el príncipe Alberto para la conocida revista People en referencia al constante examen público de los medios de comunicación al que la familia real británica está sometida. 

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