Carlos de Inglaterra (72 años) ha querido rendir un especial homenaje a su padre, el duque de Edimburgo, tras su pérdida el pasado viernes, 9 de abril. El heredero al trono británico ha grabado un vídeo a las puertas de su residencia de Gloucester y que ha sido difundido a través de la cuenta oficial de Twitter de la casa real británica. Una grabación de un minuto y medio en la que se refiere a Felipe de Edimburgo como "mi querido papá" y le describe como "una persona muy especial".

Además, se sentía especialmente conmovido por la cantidad de mensajes de cariño que tanto él como toda su familia han recibido en los últimos dos días: "Se sentiría profundamente orgulloso por la cantidad de personas que tanto aquí como en otras partes del mundo comparten nuestro dolor. Mi padre era una persona muy especial que, por encima del cualquier otra cosa, se habría sorprendido ante las reacciones y las palabras tan hermosas que se están diciendo sobre él".

El príncipe Carlos, que se ha convertido en el gran apoyo de su madre desde que falleciera el duque, terminaba su intervención asegurando que, justo por ese motivo, por la reacción que habría provocado en su padre cómo miles de personas de todo el mundo se han volcado para despedirle y mandar sus condolencias, "mi familia y yo nos sentimos muy agradecidos de un apoyo que nos mantendrá en pie frente a esta pérdida en particular y en un momento especialmente triste".

El mensaje llegaba tras conocerse algunos detalles concretos del funeral, como que tendrá lugar el próximo sábado, 17 de abril, y que a las dos de la tarde -hora en la que se espera comiencen los actos fúnebres en su memoria- de ese día, se pedirá a la nación que guarde un respetuoso minuto de silencio. Debido a las restricciones marcadas en Reino Unido por la pandemia, tan solo podrán estar presentes 30 personas. Entre ellas, se ha confirmado que estará el príncipe Harry (36), quien volará desde California solo: su esposa, Meghan Markle (39), en la recta final del embarazo, se quedará en Estados Unidos por recomendación médica.

Tributo en la BBC

Poco después de que el príncipe de Gales realizara esa aparición, tanto él como sus tres hermanos, la princesa Ana (70), Andrés de York (61) y Eduardo de Wessex (57) recordaban algunas de las anécdotas vividas al lado de su padre en un reportaje realizado por la BBC. "Su energía era asombrosa a la hora de apoyar a mi madre y de haberlo hecho durante tanto tiempo. Yo creo que eso representa un logro asombroso", explicaba Carlos de Inglaterra, quien revelaba que el duque no podía soportar a "los necios", por lo que había que medir mucho y muy bien las palabras que se pronunciaban en se presencia.

La princesa Ana, por su parte, ponía en valor la incondicionalidad con la que siempre estaba dispuesto a ayudar a cualquiera ante un problema. También lo complicado que tuvo que ser alejarse de la marina, donde tomaba decisiones para, por amor, pasar a un segundo plano. Ana explica cómo tenía una "habilidad extraordinaria" para ver el lado positico de las cosas.

"Por la noche nos reuníamos, nos sentábamos juntos en el sofá y él nos leía", recuerda el príncipe Andrés esa afición, la de la lectura, que tal y como ha publicado el diario británico The Mirror, mantuvo hasta el fin de sus días. "Consideraba que su papel era el de apoyar a la reina", apunta, además, el tercero de sus hijos. Una idea con la que coincide el príncipe Eduardo: "Siempre estuvo ahí como un pilar en la vida de la reina". También explicaba cómo, para él, ha sido un apoyo imprescindible ante las adversidades.

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