Todas las que saben de moda son conscientes de que el tejido vaquero es el mejor aliado para pasar con honor la peor época del año, el entretiempo. La primavera vuelve locos nuestros armarios con sus cambios de temperatura y el denim es la mejor opción para sobrellevarla. No es común ver a las royals luciendo unos pantalones vaqueros, son demasiado sport para casi todos sus actos, pero es verdad que el uso de este material en otros diseños, como por ejemplo, el vestido, no es una mala opción para Reinas y Princesas de nuestro tiempo.

Y eso es lo que debido pensar la reina Letizia (48 años) esta mañana de viernes en la que ha presidido un grupo de trabajo sobre el papel de la mujer en la internacionalización de la economía española, para que luego digan Rufián & Co que nuestra Reina no es feminista.

El caso es que la esposa de Felipe VI (53) ha sacado del armario de Zarzuela un vestido en denim que estrenó en la primavera de 2018. Se trata de un diseño de la firma alemana Hugo Boss, de la colección Boss que cuando ella lo estrenó (porque no sabemos si lo compró) tenía un precio de 200 euros. De aquel día a esta mañana, Letizia le ha realizado un cambio fundamental que ha hecho que mejore considerablemente.

La Reina le ha cambiado el cinturón. El original que acompañaba el diseño es un poco más sport. La primera vez que lo lució sí que lo llevó la tal cual, la segunda se lo puso dado la vuelta y hoy ha decidido, con buen criterio, cambiarlo por uno en tono nude mucho más apropiado.

El cambio del accesorio que lleva en la cintura le ha venido bien para conseguir una combinación de zapatos más sencilla, ya que se ha calzado unos a juego de la firma Lodi que tiene desde hace varias temporadas. Me asombra la facilidad con la que la Reina se pone los salones de tacón con o sin medias, el mismo modelo. A nosotras cualquier zapato de invierno que nos pongamos sin las medias correspondientes, nos hace una herida que nos tiene días medio cojeando.

Es curioso porque la Ministra de Igualdad, Irene Montero (33) -republicana ella declarada, pero a la que se le ve con mucha sintonía con Letizia- ha llevado unos zapatos súper parecidos. Sin duda, una fatal coincidencia y un claro tierra, trágame para ambas. Sabido es que coincidir en un mismo acto con algo igual o parecido, en este caso los zapatos, no deja de ser un tanto engorroso. Eso sí, lo han resuelto muy bien. Así que, queda patente que les une algo más que su mutua preocupación por las mujeres y sus problemas.

En las joyas, Letizia ha querido darnos una sorpresa hoy ya ha sacado del fondo de su joyero unos pendientes de la firma TOUS. Cada uno son diferentes, es decir, el de la oreja derecha lleva una esmeralda mientras que el de la izquierda está hecho con un rubí. Cuando los estrenó en 2014 costaban 814 euros. Lo que no ha sorprendido a nadie es el anillo de Karem Hallam que llevaba puesto.

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