Tan solo 24 horas después de que Virginia Giuffre, una de las supuestas víctimas del empresario acusado de tráfico sexual de menores, Jeffrey Epstein, presentara una demanda civil en Nueva York contra el príncipe Andrés de Inglaterra (61 años), el hijo de la reina Isabel II (95) ha iniciado sus vacaciones en la residencia Balmoral, como marca la tradición. 

Así pues, este pasado martes el príncipe Andrés llegaba a Balmoral para pasar sus vacaciones con la Reina. Tal y como recoge Daily Mail, el príncipe, acompañado de su exmujer, Sarah Ferguson (61), se ha enfrentado a su madre en la residencia familiar de verano. Todo ello, mientras sus abogados trabajan en su defensa tras la grave acusación vertida por Virginia Roberts Giuffre.

Una delicada situación que no hace más que incrementar la tensión en Balmoral, mermando de algún modo las relaciones maternofiliales. La joven Giuffre ha alegado que Andrés abusó sexualmente de ella cuando tenía 17 años, y que él sabía que ella era una víctima adolescente de tráfico sexual. En esa línea, Virginia afirma que fue obligada a tener relaciones sexuales con él y que Jeffrey Epstein la prestó con fines sexuales. Tan difícil se encuentra el proceso legal que hace unas horas se ha definido la acción legal como una "granada a la espera de estallar".

En medio de este escenario, el príncipe aún no ha hecho ningún comentario público sobre la demanda. Según desliza el mencionado tabloide, el perro de Andrés de York legó a Balmoral en un automóvil separado una hora antes, lo que sugiere que el príncipe podría estar planeando una estadía prolongada. Andrés, que normalmente vuela a Aberdeen en un jet privado para sus visitas a Balmoral, parece haber tomado medidas para evitar a los fotógrafos, pues aterrizó en un aeropuerto diferente, e incluso condujo su propio vehículo hasta la residencia familiar. 

La demanda de Giuffre

"Hoy mi abogado presentó una demanda contra el príncipe Andrés por abuso sexual bajo la Ley de Víctimas Infantiles. Como explica en detalle la demanda, fui traficada a él y abusada sexualmente por él", aseguró hace unos días Giuffre en declaraciones a la revista estadounidense People. En 2019, Giuffre ya sostuvo que, después de haber sido presentada por Epstein al duque de York, este último le obligó a tener relaciones sexuales tres veces entre 1999 y 2002, cuando ella era menor, algo que Andrés de York siempre negó. 

La supuesta víctima, sin embargo, aseguró este pasado lunes que quiere responsabilizar al príncipe Andrés, y lanzó el mensaje de que los "ricos y poderosos no están exentos" de rendir cuentas ante los tribunales. "Espero que otras víctimas vean que es posible no vivir en silencio y atemorizado, sino recuperar tu vida al hablar públicamente y exigir justicia", agregó. Giuffre señaló, asimismo, que no fue fácil decidir presentar la demanda, puesto que como madre y esposa su familia "es lo primero", y teme ser objetivo de ataques del miembro de la familia real británica: "Pero sabía que si no iniciaba esta acción, les decepcionaría a ellos y a todas las víctimas". 

Después de ser acusado públicamente por Giuffre de haber abusado de ella como resultado de haber sido traficada por Epstein, el príncipe Andrés de Inglaterra niega "categóricamente" haber mantenido relaciones sexuales con ella en una sonada entrevista con la cadena BBC divulgada en noviembre de 2019. "No ocurrió. Puedo decirle categóricamente que nunca pasó. No me acuerdo haber conocido alguna vez a esta señora", insistió varias veces el príncipe en sus declaraciones a la BBC.

El príncipe, cuya amistad con Epstein ha causado gran controversia, admitió haberse hospedado varias veces -unas cuatro- en las residencias del empresario en EE.UU. pero que en ningún momento llegó a sospechar que hubiera comportamiento inapropiado por parte del empresario, quien se suicidó en una celda en Nueva York en agosto de 2019 poco después de ser arrestado por tráfico sexual.

Andrés dijo que conoció a Epstein a través de su amiga Ghislaine Maxwell, hija del fallecido magnate de la prensa Robert Maxwell, quien también ha sido arrestada y está a la espera de un juicio en Nueva York previsto para noviembre de este año, cuando se enfrentará a varios cargos, entre los que destacan los de tráfico sexual.

Cuando se le preguntó en la entrevista por una foto hecha pública en la que él mismo aparece agarrando la cintura de Giuffre, supuestamente tomada en la residencia de Maxwell de Londres en marzo de 2011, cuando la demandante tenía 17 años, el duque afirmó que no recordaba ese momento. Con la demanda, el duque de York podría verse forzado a ser interrogado bajo juramento, así como entregar mensajes de texto, correos electrónicos o cartas privadas relacionadas con el caso.

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