Con el rey Felipe (53 años) en Puerto Rico, la reina Letizia (49) ha tomado las riendas del tema. Letizia ha presidido en el Senado los Premios Luis Carandell de Periodismo, que tradicionalmente han estado representados siempre, primero como Príncipes y después como Reyes, por los dos. Pero vamos, que ella se siente tan cómoda, porque además, es de esos actos en los que disfruta compartiendo mesa con sus antiguos compañeros de profesión.

Y si hay que ir sobre seguro, lo tiene claro: el rojo es su color. Letizia siempre tiene en este tono uno de sus mejores aliados, ya que con él ha vencido en muchas batallas, como en su primera gran guerra, cuando tuvo que presentarse ante Europa en la boda de Federico (53) y Mery de Dinamarca (49) con todos los royals esperando a conocerla. Vestida por Caprile en color carmesí, todavía recordamos con cariño aquel gran triunfo.

Si nos pusiéramos a contar el número de vestidos en color rojo que hay colgados en su vestidor de Zarzuela igual nos llevaríamos un susto. Se los hemos visto largos, cortos, ceñidos, oversize, de manga corta, larga, con volantes, escote barco, cuello halter… Es casi imposible contarlos todos.

El que ha elegido este jueves 27 de enero para su almuerzo en el Senado es de los más sencillos de todos. Firmado por Carolina Herrera, lo estrenó durante la visita que toda la Familia Real hizo al Santuario de Covadonga, en Asturias, en el 2018. El modelo está hecho a medida, solo para ella, y se trata de un diseño ceñido, de manga larga con falda tipo lápiz, que llega ligeramente por debajo de la rodilla, y cuello redondo, un patrón hecho para favorecer la figura estilizada de la Reina.

Aquella vez, en su tierra natal, apostó por unos complementos más sencillos, más tranquilos, en esta ocasión ha ido a por todas y los ha conjugado con el tono del traje, pero no en liso. Se trata de unos salones que combinan dos tejidos, el ante y la piel imitando a la serpiente. Los firma la marca española Magrit y llevan la cartera a juego. Los complementos son el único estreno del look de este 27 de enero, y si nos quedaríamos sin palabras al contar el número de vestidos rojos que tiene en su armario, nos pasaría lo mismo con la cantidad de salones en este tono. Es sorprendente las muchas ocasiones que tiene para lucir tanta variedad.

En las joyas ha vuelto a lucir el anillo de Karen Hallam y unos pendientes que llevan en su joyero desde que llegó a Zarzuela. Son unos pequeños diamantes y rubíes rojos que luce mucho cuando elige este tono para vestirse.

Parece que la Reina ha decidido dejarse la melena larga, aunque en nuestra opinión, eso es algo que echa años encima a cualquiera.

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