Felipe VI celebró su 54 cumpleaños con la princesa Leonor: las visitas secretas de los Reyes a Gales
Según ha podido confirmar EL ESPAÑOL, los soberanos están muy pendientes de los progresos de la heredera en su internado británico.
3 febrero, 2022 18:20Noticias relacionadas
Este pasado domingo, día 30 de enero, el rey Felipe VI cumplía 54 años y, como la mayoría de medios de comunicación publicaba, lo hacía, a priori y por primera vez desde que es padre, alejado de su primogénita, la princesa de Asturias, Leonor de Borbón (16), que estudia en Gales desde el mes de agosto.
Pero la vida de los Reyes no siempre es tan protocolaria y ortodoxa como nos quieren hacer ver. A menudo, nuestros soberanos se escapan en su tiempo libre, como una familia más, a hacer planes de ocio, desconexión y descanso de los que pocas veces se llega a tener constancia.
En esta ocasión, EL ESPAÑOL ha podido confirmar en exclusiva por fuentes de total solvencia que el monarca no estaba dispuesto a abrazar esta nueva vuelta al Sol sin la compañía de su hija. Felipe VI, junto a la reina Letizia (49) y su hija pequeña, la infanta Sofía (14), viajó a Gales el pasado fin de semana para celebrar su cumpleaños allí.
Según la información que maneja este periódico, los tres miembros de la Familia Real que aún residen en el Pabellón del Príncipe volaron desde Madrid el sábado, día 29 de enero, a mediodía y regresaron el domingo 30 por la noche. El lunes a primera hora de la mañana, Felipe y Letizia tenían que tomar otro vuelo, esta vez, por motivos de trabajo. Su destino fue Viena, donde rindieron homenaje a las víctimas del nazismo e inauguraron en el Museo Belvedere una exposición sobre la influencia del psicoanálisis de Sigmund Freud en la obra de Salvador Dalí.
Y no es que este viaje secreto de los Reyes y la infanta Sofía a Gales haya sido una excepción. Según apuntan las mismas fuentes, Felipe y Letizia suelen ir habitualmente porque están muy implicados en la educación de la princesa de Asturias y prefieren reunirse en persona con sus profesores para observar cómo está progresando su hija mayor en el UWC Atlantic College, donde estudia el primero de los dos cursos del Bachillerato Internacional.
Sus otros destinos privados
Desde que Felipe y Letizia se dieran el 'sí, quiero' el 22 de mayo del año 2004 han mantenido a rajatabla el concepto de lo que para ellos son sus vacaciones privadas. Durante los 15 primeros días de agosto de cada año, los Reyes se lucen, se exhiben, posan en el palacio de Marivent, en la Almudaina, en el Real Club Náutico de Palma o a las puertas del restaurante Ola de mar. Pero llegado el momento, -su momento- se evaporan.
Sin embargo, como en esta ocasión con su escapada exprés a Gales, sus discretos planes no siempre salen como desean. En abril de 2004, tan sólo un mes antes de la boda real, trascendió que los todavía novios habían pasado unos días en Antillas, donde el empresario venezolano Lorenzo Mendoza tiene una mansión que cedió al entonces príncipe de Asturias y su pareja para que tomasen fuerzas antes de su gran día.
En 2015, Felipe y Letizia, ya como soberanos, volaron hasta el Algarve portugués con sus dos hijas y se hospedaron en el castillo de São João do Arade, propiedad de su íntimo, el aristócrata Vasco Manuel de Quevedo Pereira Coutinho (69). Desde el verano de 2014, en el que Felipe fue entronizado, sus vacaciones privadas no suelen ser en aquellos exclusivos confines del mundo.
Las costas mediterráneas están lo suficientemente bien comunicadas como para regresar en poco más de una hora en caso de que suceda algo por lo que su país le necesite. Así pasó en agosto de 2017, con los atentados yihadistas de Las Ramblas de Barcelona y Cambrils. Según se publicó, la Familia Real se encontraba en la Costa Azul, de donde regresaron de inmediato. Francia, Turquía, las islas griegas y hasta un viaje de chicas a Roma son sólo algunos de los destinos a los que ellos mismos llaman privados.
En abril de 2019, EL ESPAÑOL confirmó que Letizia, Leonor y Sofía tomaron un vuelo regular desde Madrid hasta Roma para sus vacaciones de Semana Santa antes de acudir a la Misa de Pascua del Domingo de Resurrección, un año después del escándalo en la Catedral de Palma. El rey Felipe, por compromisos institucionales, se unió a la Ciudad Eterna un poco más tarde.
Todo ello sin mencionar la joya de la corona de todos sus viajes: la luna de miel de Felipe y Letizia, en la que recorrieron 42.000 kilómetros por el mundo alojándose en los mejores complejos de lujo bajo el pseudónimo de Sr. y Sra. Smith, en alusión directa a la película protagonizada por Brad Pitt (58) y Angelina Jolie (46).
El fascinante periplo, según publicó The Telegraph, fue pagado a medias entre el rey Juan Carlos (84) y su íntimo amigo Josep Cusí, un empresario naviero que desembolsó 269.000 de los 467.500 dólares que costó el total del viaje.
[Más información: La luna de miel de ensueño de Felipe y Letizia: 42.000 kilómetros en paraísos como el señor y la señora Smith]