El pasado domingo 20 de febrero el palacio de Buckingham anunciaba el positivo de Isabel II (95 años) por coronavirus. Tras una semana en la que la monarca ha cancelado varios de los eventos virtuales que tenía programados al presentar "síntomas leves" de la enfermedad, la institución ha vuelto a anunciar una nueva modificación en su agenda. 

Su reaparición ha vuelto a posponerse y la Reina no estará presente en la recepción organizada para el próximo 2 de marzo en el Castillo de Windsor, su residencia oficial. "La Reina está de acuerdo con el consejo del Ministerio de Relaciones Exteriores de cancelar una recepción diplomática el miércoles 2 de marzo", se puede leer en el comunicado, en el que no se especifica el motivo de su ausencia, que bien podría ser por su estado de salud o estar provocado por el conflicto de Ucrania. 

Este es el tercer acto que la Reina ha cancelado tras conocerse su positivo. El pasado jueves, día 24, se vio obligada a anular, por segunda vez, unas audiencias telemáticas que tenía agendadas al no encontrarse bien. Sin informar de cuándo se retomarán, un portavoz de palacio explicaba entonces que la monarca continuaba desempeñando "tareas ligeras" como, por ejemplo, una reunión telefónica con el primer ministro, Boris Johnson (57).

El de este 2 de febrero es solo uno de los tres actos que Isabel II tiene previstos de cara a marzo y a los que en su momento se dijo "confiaba en asistir". El próximo 14 de marzo tiene planeado acudir al Servicio de la Commonwealth en la Abadía de Westminster y, 15 días después, al servicio conmemorativo del duque de Edimburgo.

Por otro lado, se prevé que la Reina asista a algunos de los "importantes" actos que marcarán sus 70 años en el trono británico el próximo junio, pero no a todos. 

Isabel II fue vacunada contra la Covid-19 en enero de 2021 con la primera dosis, en marzo de 2021 recibió la segunda, y la jefa del Estado recibió una tercera dosis, la de refuerzo, el pasado mes de octubre.

Aunque hasta ahora presenta síntomas leves, existe un gran temor por su estado. No solo por su avanzada edad -cumplirá 96 el próximo mes de abril-, sino también porque su salud se ha resentido en los últimos meses. El pasado octubre, la Reina hizo saltar todas las alarmas cuando apareció con bastón en un acto religioso, modificó su agenda y pasó una noche en el hospital. No obstante, desde Buckingham señalaron que su estancia en el centro sanitario se debía a "exámenes preliminares".

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