49 días después de regresar a Mónaco, el pasado 12 de marzo, la princesa Charlène (44 años) ha retomado su agenda. Acompañada de su marido, el príncipe Alberto (63) y de sus dos hijos, Jacques (7) y Gabriella (7), la exnadadora ha acudido a la entrega de premios del e-Prix de Mónaco de Fórmula E, un campeonato automovilístico que está teniendo lugar estos días en el país europeo.

Un día señalado más allá de la cita deportiva, pues ha sido el primer acto oficial al que la sudafricana ha acudido en algo más de un año. Charlène ha vuelto a sorprender con su estilismo, que ya adelantó en la fotografía familiar publicada en sus redes sociales el pasado 17 de abril: el cabello muy corto y teñido de rubio platino.

Ha apostado por un outfit muy discreto compuesto por un traje de pantalón oversize en color gris antracita que destacaba por unas originales aberturas en las perneras. Lo ha combinado con unos discretos pendientes de botón y su anillo de compromiso, que ha lucido en la mano izquierda. En cuanto al maquillaje, ha destacado con sus ojos con una sombra muy oscura. 

Un look con el que centraba toda la atención en sus hijos, de los que ha estado muy pendiente. Especialmente de Gabriella, a quien durante el acto ha abrazado en varias ocasiones de un modo muy maternal, el mismo que ya mostró en su última imagen compartida en redes.

Pese a ser una cita importante al tratarse de su esperado regreso a la escena pública, Charlène de Mónaco se ha mostrado seria y tan solo ha esbozado algunas sonrisas de manera puntual. Sin embargo, se la notaba cómoda sobre el escenario.

La Familia Real monegasca ha compartido la grada con Alejandro Agag (51), yerno de José María Aznar (69), quien es uno de los creadores de la Fórmula E. También con Louis Ducruet (29), el hijo mayor de Estefanía de Mónaco (57) y, por lo tanto, sobrino de Alberto y Charlène. 

Regreso esperado

Tras su regreso a Mónaco, el 12 de marzo, el Principado anunciaba en un comunicado oficial que la princesa Charlène pronto retomaría sus compromisos institucionales. Sin embargo, ha pasado más de un mes para su regreso. "En cuanto la salud se lo permita, la Princesa podrá disfrutar de la alegría de convivir con los monegascos, algo que tanto ha echado de menos", expresaban entonces, sin precisar los problemas de salud de los que se recupera la exnadadora.

Fue el 16 de noviembre de 2021, cuando la Casa Real monegasca anunció que la princesa Charlène se retiraba por un tiempo para recuperar su salud y empezar "un período de calma y descanso". Aquella decisión se tomaba una semana después de que la exnadadora aterrizara en el Principado tras permanecer seis meses en Sudáfrica, país al que se desplazaba en mayo del año pasado.

Su viaje al continente africano, centrado en la conservación de la fauna salvaje y en la lucha contra la caza furtiva, se prolongó más de lo previsto debido a una grave infección de oídos, nariz y garganta que contrajo tras someterse a un levantamiento de senos paranasales e injerto óseo. Un delicado estado de salud que la obligó a pasar por quirófano hasta en tres ocasiones y que la ha mantenido ausente de la vida pública durante varios meses.

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