Hussein de Jordania (28 años) ha sido el protagonista de los últimos días tras conocerse su compromiso con Rajwa Al Saif. Una boda que, pese a que aún no tiene fecha, reunirá a buena parte de las realezas mundiales. A ella muy posiblemente acudirá otro joven heredero árabe, Theyazin bin Haitham, que ha celebrado su cumpleaños este 21 de agosto.
A sus recién cumplidos 32 años, el hijo del actual sultán de Omán está llamado a suceder algún día a su padre, Haitham bin Tariq. Si bien es menos conocido que Hussein, lo cierto es que en su país Theyazin tiene una popularidad similar a la de su homólogo hachemita. Como él, también es joven, atractivo, millonario y algún día ocupará el trono de su país.
Uno de los datos más destacables de su biografía es que es el primer príncipe heredero de la historia de Omán. Hasta que su padre no fue nombrado sultán, el 10 de enero de 2020, era el anterior mandatario quien elegía a su sucesor. Haitham, sin embargo, decidió modernizar las reglas constitucionales y estableció la línea sucesoria por primogenitura y lazos de sangre. Un gesto con el que se acercaron al resto de dinastías.
Poco después de esta noticia, el omaní vivió uno de los momentos más importantes de su vida al pasar por el altar. En noviembre del pasado año se casó con Sayyida Meyya (32), quien además de ser su novia, es su prima hermana por partida doble. El padre de la joven es el hermano de su padre, Shihab bin tariq Al Said, Primer Ministro de Asuntos de la Defensa, y, su madre, es Rawdah bint Abdullah, hermana de su madre. Un hecho curioso y que no se da en otras monarquías, pero que es común en el país pérsico.
Pese a que apenas se ha mostrado una fotografía del ya matrimonio, que se casó en una ceremonia íntima a más no poder, los dos han tenido una educación occidental. Mientras que Theyazin, que es Ministro de Cultura, Juventud y Deportes, estudió Ciencias Políticas en la Oxford Brookes University de Reino Unido, de Sayyida Meyya se sabe que estudió diseño de interiores y que ha realizado diferentes exposiciones de fotografía, una de ellas en el Museo digital de Arte Khaleeji.
Theyazin bin Haitham en una imagen de redes sociales.
El hecho de que no se hayan divulgado imágenes de la pareja está ligado a la estricta tradición musulmana del país. De hecho, hasta la proclamación del padre de Theyarin nunca se había mostrado el rostro de una esposa del sultán. Históricamente las esposas de los dirigentes debían permanecer alejadas de la vista de otros hombres, según dictan las reglas del purdah.