La Casa Real británica ha hecho una excepción en su estricto protocolo. Este sábado, 17 de septiembre, en la vigilia por la reina Isabel II, el príncipe Harry (38 años) podrá llevar el uniforme militar, un atuendo que hasta ahora tenía prohibido. Aunque estuvo al servicio en Afganistán y pasó 10 años en el Ejército, el hijo menor del rey Carlos III (73) no podía vestir este traje por no ser un miembro activo de la Corona.
En un principio se había indicado desde el palacio de Buckingham que Harry solo podría vestir con traje de día en los eventos previos al funeral de su abuela, durante los días oficiales de luto. Pero ahora, según revelan los medios locales, se ha cambiado de opinión.
El diario The Sun, tras contactar con fuentes oficiales, informa que el príncipe Harry podrá lucir su uniforme militar en la vigilia que celebrarán los ocho nietos de la soberana, como su hermano, Guillermo (40), y sus primos Peter Phillips (44) y Zara Tindall (41)
Ha sido el rey Carlos quien le ha otorgado este permiso a su hijo menor, veterano de la guerra afgana. Así, está previsto que Harry aparezca en uniforme durante el período de reflexión de 15 minutos en Westminster Hall, donde permanece el féretro de la Reina.
Se trata de una medida excepcional, ya que Harry y su mujer, Meghan Markle (41) no son miembros activos de la monarquía desde 2020, cuando decidieron abandonar sus funciones y mudarse a Estados Unidos, donde residen con sus hijos, Archie (3) y Lilibet Diana (1).
La Casa Real británica también ha hecho una excepción con el príncipe Andrés (62), quien vestirá su uniforme militar como "señal especial de respeto" en otra vigilia que celebrarán los hijos de Isabel II la tarde de este viernes, 16 de septiembre. Así lo confirmó el palacio de Buckingham hace unos días.
Al igual que Harry, el príncipe Andrés, segundo hijo de Isabel II y el duque de Edimburgo, tampoco es un miembro activo de la Corona. El duque de York tuvo que abandonar sus actividades públicas por haber estado involucrado en el escándalo de abuso sexual de menores del fallecido pederasta norteamericano Jeffrey Epstein y después de llegar a un acuerdo extrajudicial con Virginia Giuffre, una mujer que le acusó de abuso cuando ella cuando era menor de edad.
Por ello, el pasado mes enero, la reina Isabel II despojó al duque de York de todos sus puestos militares honorarios, entre ellos el de coronel de las Guardias Granaderas. Andrés, además, tuvo que renunciar a su título de Alteza Real. En cambio, el príncipe Harry, que fue oficial en las Fuerzas de la Marina Real y luchó en la guerra de las Malvinas, conserva su cargo de vicealmirante.