Los reyes Felipe VI (54 años) y Letizia (50) continúan con su visita oficial a Croacia. Al no tratarse de un viaje de Estado, en la noche de este miércoles, 16 de noviembre, la cena con la que han sido homenajeados en el Palacio Presidencial de Zagreb no era de gala. Sin embargo, las mujeres podían vestir de largo y los caballeros podían ir de chaqueta y corbata.
Las tiaras se han quedado en Madrid, guardadas en la Zarzuela, pero eso no significa que Letizia no haya lucido sus mejores galas. La Reina ha vuelto a tirar de armario, como ha hecho esta misma mañana para sus primeras horas en la capital croata, y ha sacado de su vestidor un diseño que ya había llevado en una ocasión, pero esta fue muy especial.
Se trata de un diseño que estrenó en los pasados Premios Princesa de Girona en Barcelona, una noche que compartió con sus dos hijas, la princesa de Asturias (17) y la infanta Sofía (15) y que para la Familia Real es uno de los momentos más esperados del año.
[Letizia aterriza en Croacia con el vestido verde que lució en el funeral del duque de Edimburgo]
Se trata de un vestido de escote asimétrico y un hombro al descubierto con un aplique de joya que descansa sobre el pecho, dándole un efecto visual superelegante, original y sofisticado. La etiqueta que firma esta preciosidad es la marca española Boüret, el modelo se llama Luna y está realizado en seda de crepé. Duró unas horas a la venta en su web, en cuanto la Reina lo lució, se terminó. Y eso que no tenía un precio superasequible, ya que costaba unos 500 euros.
Se trata de una prenda made in Galicia y todos los detalles están hechos a mano por las artesanas de la zona. Suponemos que el palacio de Zagreb tendrá puesta la calefacción a tope, porque ahora mismo allí hace mucho frío y el vestido elegido es sin mangas, que en Girona en julio era perfecto, pero en Zagreb en noviembre... igual es un poco ligero.
El caso es que la Reina lo ha combinado con una cartera de mano a juego, en azul noche y unos salones en piel con el talón abierto de Carolina Herrera a tono. Desde luego en Croacia nadie dirá que sufre una enfermedad en su pie izquierdo, ya que por ahora, no se ha bajado de los tacones.
Letizia, espléndida, ha decidido invertir su rutina de cabello durante esta jornada. En la mañana de este miércoles lucía un recogido en moño, mientras que para su cita de la noche ha decidido soltarse la melena, mientras que normalmente lo hace al revés.
Pero sin duda, los protagonistas del look de esta noche han sido los pendientes. Se trata de un diseño que durante su reinado, la emérita Sofía (84) lució en varias ocasiones. Con forma de lágrima invertida están realizados en oro blanco y diamantes, una verdadera obra de arte que se lleva a matar con el anillo de bisutería de Karen Hallam que ha vuelto a lucir en su mano.
Los pendientes, que son espectaculares, fueron un regalo del desaparecido sultán de Omán, Qabus bin Said durante la visita de Estado que los eméritos realizaron a su país en 1985. Fue un hecho histórico, ya que fue la primera vez que una mujer, en este caso la reina Sofía, era situada en el estrado con el resto de los invitados para escuchar los respectivos himnos nacionales.