Margarita de Dinamarca (82 años) afronta uno de los momentos más convulsos de su reinado. La decisión de despojar de sus títulos de príncipes y princesas a los hijos de Joaquín (41) ha desatado la polémica en su país y ha provocado un cisma familiar que se hará mucho más evidente en las celebraciones de Navidad. Este año, la monarca pasará las Fiestas sin ninguno de sus vástagos ni de sus nietos.
Según ha confirmado la Casa Real danesa, el heredero, Federico (54), viajará hasta Australia, el país de origen de su mujer. En unas vacaciones privadas, los príncipes y sus hijos disfrutarán junto la familia de Mary (50), quien no vista su nación desde hace cinco años.
Joaquín y Marie (50) también viajarán al extranjero junto a sus hijos. Se trata de un plan que tenían desde hace mucho tiempo y del que no se han desvelado mayores detalles. De momento, se desconoce el destino.
Federico y Joaquín de Dinamarca junto a su madre, la reina Margarita.
La reina Margarita, por su parte, seguirá con la tradición de la Casa Real. Desde el 21 y hasta el 30 de diciembre, la monarca se alojará en el Castillo de Marselisborg, junto a su hermana Benedicta (78) y varios amigos privados. Según lo previsto, el 31 de diciembre a las 18:00 horas pronunciará su discurso de Año Nuevo desde el Palacio de Christian IX en Amalienborg.
Benedicta es una de las que apoya a Margarita en la polémica medida que afecta a cuatro de sus nietos. "Creo que, por supuesto, es difícil para ellos al principio, eso está bastante claro, pero mi hermana toma decisiones sabias. También como Reina. Piensa en el futuro y no aquí y ahora, y creo que eso es lo más importante", expresó la Princesa y onceava en la línea de sucesión al trono danés en un acto público, celebrado pocos días después de que la soberana anunciara la noticia.
La reina Margarita de Dinamarca junto a sus hermanas.
Fue a finales de septiembre, cuando la reina Margarita, a través de un comunicado, desveló que a partir del próximo 1 de enero de 2023, los cuatro hijos de Joaquín, Nicolás (23), Félix (20), Henrik (13) y Athena (10), dejarán de ser príncipes y princesas para ser condes y condesas de Monpezat.
"La decisión de la Reina está en línea con adaptaciones similares que otras casas reales han implementado de diferentes maneras en los últimos años", rezaba el comunicado. "Su Majestad quiere crear el marco para que los cuatro nietos puedan moldear sus propias vidas sin verse limitados por las especiales consideraciones y obligaciones que implica una afiliación formal a la Casa Real como institución", añadía.
Aunque Joaquín de Dinamarca ya se reunió con su madre para intentar solucionar sus problemas y el príncipe Federico se mostró apenado por su hermano, a pesar de apoyar la decisión de la Reina, la relación familiar parece ser difícil. Desde el anuncio de la soberana, solo se les ha visto juntos en un acto público que tuvo lugar el pasado 12 de noviembre con motivo del Jubileo de Plata de la soberana.