Capitán de mi alma. Así es como se titula la tercera y última parte de Spare -En la sombra- (Penguin Random House), las explosivas memorias autobiográficas del príncipe Harry (38 años), que ya han provocado un enorme terremoto en Reino Unido y gran parte del mundo.
El broche final del libro, al que EL ESPAÑOL accedió en primicia cinco días antes de su puesta en venta oficial, que será el próximo 10 de enero; es, básicamente, una oda al amor. El amor romántico que viaja por todas las etapas: el principio, cuando conoció a Meghan Markle (38) a través de Instagram gracias a su amiga Violet, las citas furtivas en el club Soho House 76 de Londres, su primer viaje juntos a Botsuana...
Si bien el hijo menor del rey Carlos III (74) deja claro lo mucho que se aman él y su esposa, también ha tenido un hueco a lo largo de las casi 600 páginas de Spare para revelar una gran discusión con Meghan cuando todavía eran novios.
1. La discusión
"A lo mejor el vino se me subió a la cabeza. [...] Por algún motivo, cuando la conversación dio un giro inesperado, me sentí susceptible. Luego, me puse furioso. Reaccioné de forma desproporcionada y de malas maneras. Meg hizo un comentario y yo me lo tomé a mal. [...] Le grité, la hablé con rudeza, con crueldad. [...] Meg salió de la cocina y desapareció durante un cuarto de hora. Fui a buscarla al piso de arriba. Estaba sentada en su dormitorio. Estaba tranquila, pero me dijo en un tono sereno y pausado que jamás tolteraría que nadie le hablara así".
Harry alega en su libro que veía absolutamente normal relacionarse así, en alguna ocasión, con determinadas personas. Lo había visto y vivido en su casa, desde pequeño. Pero la discusión, siempre según él, no venía por algo extraído de la conversación, sino por "algo mucho más profundo".
[El día que el príncipe Harry fumó porros delante de la Policía que hacía guardia para protegerle]
2. Kate y Willy, fans de Suites
Cuando Harry le contó a su hermano, al que constantemente llama Willy en el libro, que estaba conociendo a una mujer que le gustaba de verdad, el heredero al trono británico no podía creerse que fuera una actriz, americana y que saliera en Suits, una de sus series favoritas. "Kate y Willy son fans de la serie. No fans, devotos", detalla el duque de Sussex en este capítulo conclusivo del libro.
3. La tiara de la boda
"Poco antes de la boda, mi abuela se puso en contacto con nosotros y nos ofreció su colección de tiaras. Incluso nos invitó al palacio de Buckingham para que Meg se las probara. [...] Estaba presente la vestidora y confindente de mi abuela, Angela". Tras la elección de la tiara definitiva, "nos pusimos en contacto con Angela y le preguntamos si podía enviarnos la tiara para que Meg practicara cómo ponérsela", tal y como le aconsejó Isabel II.
"Angela no respondió a ninguno de nuestros mensajes. [...] Cuando por fin logramos ponernos en contacto con ella, dijo que la tiara no podía salir del palacio sin un ordenanza y escolta policial. [...] Inexplicablemente, contestó que no podía ser. Porque tenía una agenda muy apretada". [...] "El peluquero de Meg vino desde Francia para el ensayo, pero la tiara seguía sin aparecer [...] Finalmente, se personó [...] Le di las gracias, aunque añadí que nos habría facilitado mucho la vida haberla tenido antes. Echó fuego por los ojos y empezó a leerme la cartilla [...] Me lanzó una mirada que me hizo estremecer y distinguí una clara advertencia: 'Esto no quedará así'".
4. La guerra con la prensa
Si hay algo que queda claro a lo largo de las tres grandes partes en las que se divide Spare -En la sombra- es que la relación de Meghan y Harry con los medios de comunicación es radicalmente horrible. En el libro, el duque de Sussex hace una serie de acusaciones, sobre todo contra su hermano, el príncipe Guillermo.
Revela una conversación en la que Guillermo y Kate se disculpan con Meghan por el hecho de que la prensa publicase que la duquesa de Sussex hizo llorar a la hoy princesa de Gales cuando fue al revés. "Fui yo quien te hizo llorar, Meg", pronunció Kate Middleton, según su cuñado Harry. El duque de Sussex, que se ha quejado de que la prensa ha publicado información dañina sobre Meghan, subraya también que permanecer en silencio, como suele hacer el palacio ante casos polémicos, no mejora las cosas.
Lo que nadie podía esperar es que acusara directamente al Daily Mail, uno de los tabloides más ácidos con Meghan, de provocar el aborto involuntario que sufrió su esposa en julio de 2020. Sostiene, además, que cree todavía en la monarquía británica, pero cuando se le pregunta si desempeñará una labor destacada en ella en el futuro, responde con un "no lo sé".