La Casa de su Majestad el Rey tuvo conocimiento del viaje que el rey Juan Carlos (85 años) hará a Sanxenxo, Pontevedra, la próxima semana a través de los medios de comunicación. Una vez que se publicaron las noticias, un allegado del Emérito comunicó al palacio de La Zarzuela las fechas de su segunda visita a España.
El rey Juan Carlos trasladó a la Zarzuela hace unas semanas que su intención era regresar a Sanxenxo en el mes junio, después de las elecciones municipales y autonómicas del 28 de mayo. Su intención, al igual que el año pasado, era puramente ociosa, participar en una de las regatas, según han señalado fuentes del entorno del jefe del Estado.
Sin embargo, el Emérito cambió sus planes después de que el nuevo monarca británico, Carlos III (74), le invitara a un almuerzo privado el próximo martes, día 18, en Londres, desde donde viajará al día siguiente a la localidad pontevedresa para encontrarse con sus amigos de las regatas y embarcar en el Bribón.
La Casa del Rey no ha querido pronunciarse sobre la idoneidad o no de la visita de Juan Carlos, que prevé prolongar hasta el domingo 23 de abril, al término de la regata de la Copa de España en la que participa el Bribón, al asegurar que se trata de un viaje privado y de que los movimientos que haga responden a su responsabilidad.
Según la Zarzuela, Juan Carlos fue quien decidió mantener su residencia en Abu Dabi, la capital de los Emiratos Árabes Unidos, una vez que la Fiscalía del Tribunal Supremo archivó la investigación sobre su patrimonio en el extranjero y sus irregularidades fiscales y que, por tanto, es libre de viajar a donde quiera.
La portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, ha afirmado que el Ejecutivo "no tiene nada que comentar" sobre la decisión de Juan Carlos de viajar a Galicia. "Se trata de una decisión personal del Rey que no nos corresponde valorar puesto que se trata de su vida privada", ha incidido Rodríguez en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros en el palacio de la Moncloa.
Su polémica visita
La primera visita del rey emérito a España tuvo lugar en mayo de 2022, también para asistir a las regatas en Sanxenxo y estuvo rodeado de una gran expectación mediática, lo que molestó al Gobierno, que consideró que el padre del rey Felipe VI (55) había perdido una buena oportunidad para "dar explicaciones y pedir perdón". Preguntada por si el Ejecutivo mantiene que es necesario que explique su comportamiento, Rodríguez ha respondido: "Seguimos manteniendo la misma opinión".
No obstante, la ministra de Política Territorial ha remarcado en "la absoluta normalidad lo que es un viaje privado" que no merece ser comentado. Fuentes de Moncloa han indicado que la postura del Ejecutivo está alineada con la que mantiene la Casa Real y de que Juan Carlos no tiene por qué informar al Ejecutivo de sus planes ya que pertenecen a su ámbito personal.
Si el Gobierno teme que se vuelva a generar un "circo" mediático como el del año pasado, las fuentes se han limitado a señalar que dependerá del propio emérito: "Vamos a ver lo que hace cuando esté aquí". Una de las personas próximas a Juan Carlos ha admitido las dudas que genera el nuevo viaje a Sanxenxo, ante la posibilidad de que vuelva a estar rodeado por una gran expectación mediática.
"No sé si es lo más oportuno", ha añadido esa fuente, que ha explicado que la razón por la que el rey emérito haya decidido dar el paso ahora podría ser que es la cuarta vez que viaja a Europa y en las tres precedentes no se desplazó posteriormente a España.
Sus apariciones públicas
Juan Carlos estuvo en Londres con los reyes Felipe y Letizia (50) y la emérita Sofía (84) en el funeral de Isabel II el pasado mes de septiembre. A mediados de enero volvieron a coincidir en Atenas por el fallecimiento del exrey de Grecia Constantino, hermano de la reina Sofía.
Su último viaje fue a París el pasado 9 de febrero con motivo del ingreso del escritor Mario Vargas Llosa (87) en la Academia Francesa. En aquella ocasión, en la que estuvo acompañado por la infanta Cristina (57), el padre del Rey apuntó que "seguramente" iría pronto a España.
Este pasado fin de semana se convertía de nuevo en protagonista de la actualidad informativa al aparecer en una iglesia en Abu Dabi junto a su primogénita, la infanta Elena (59), y su nieto mayor, Felipe de Marichalar (24), tras asistir a la Misa del Domingo de Resurrección, el día más importante del año para la Cristiandad.