Realeza y deporte siempre han formado un tándem habitual en las monarquías. Isabel II practicaba equitación, Máxima de Holanda (51), esquí; el príncipe Harry (38) es aficionado al polo, Felipe VI (55) es un experto en vela, etc. Quizá una de las modalidades más atrevidas y también originales es la que practica desde hace mucho tiempo Felipe de Bélgica (62 años): el kitesurf con lancha. El Rey se mantiene en plena forma y se sube a la tabla siempre que puede, aunque a veces sufra algún que otro contratiempo.
Recientemente se hizo una lesión mientras surcaba el mar sujeto a la cometa, de la que todavía se está recuperando. El marido de la reina Matilde (50) dio muestras de tener algunas molestias debido a la caída durante su viaje a la Guayana Francesa, tocándose el vientre con regularidad y poniéndose la mano en el costado, como informan los periodistas encargados de cubrir la visita.
No estaba solo en este compromiso real, le acompañaba por primera vez su hijo, el príncipe Gabriel (19), en el que ha sido su primer viaje oficial. El momento culmen de este tour es el lanzamiento del cohete Ariane 5, desde el centro espacial en Korou, prevista para el jueves 13 de abril pero que tuvo que posponerse un día debido a las condiciones climáticas.
Pese a estar algo dolorido, Felipe de Bélgica ha cumplido con todas sus obligaciones, mostrándole a su hijo cómo se desempeña con maestría la labor de monarca. Ambos comparten la pasión por el deporte, ya que Gabriel es un apasionado del esquí, el ciclismo, el taekwondo, el fútbol, el tenis y el senderismo. Eso sí, parece que no se atreve con la disciplina de su padre, en la que es un experto.
Lo practica hace casi una década y es una de sus grandes vías de escape para relajar tensiones y, de paso, mantenerse en una magnífica forma física pasados los 60. Hace unos años, la Casa Real belga publicó un vídeo en el que el Rey mostraba sus habilidades para el kitesurf durante unas vacaciones en la isla de Yeu, uno de sus lugares favoritos. Allí habría tomado clases para perfeccionar su estilo y no dudada en lucirse comentando: "¡Feliz fin de semana para todos!, disfrutad de los últimos días de verano".
No es el único deporte que tiene en su lista de favoritos, también le gusta salir a correr y esquiar. El rey de los belgas acostumbra a sorprender a sus súbditos con vídeos casuales y divertidos. El año pasado se convirtió en entrenador improvisado para animar a su selección en el Mundial de Qatar y en 2017 compartía una sesión de running con el príncipe Federico de Dinamarca (54) en redes.