Ya desde hace un tiempo se sabía que el príncipe Harry (38 años) acudiría solo a la coronación de su padre, celebrada este pasado sábado 6 de mayo en la Abadía de Westminster, pues Meghan Markle (41) decidió quedarse en su mansión en Montecito, California, donde la familia reside, al cuidado de sus hijos Archie (4 años) y Lilibet Diana (1).
Lo había explicado ella misma, a través de un comunicado que apareció en una revista para cerrar cualquier especulación, después de que algunos medios afirmaran que su ausencia estaba relacionada con las desavenencias entre ella y su suegro, a raíz de aquella explosiva entrevista con Oprah Winfrey (69).
No hubo cambios y finalmente, el príncipe Harry viajó solo a Reino Unido mientras su mujer se ocupó de otras cuestiones. Por un lado, Markle pasó el fin de semana celebrando el cumpleaños de Archie, que sopló sus cuatro velas el mismo día que coronaban a su abuelo. De hecho, el duque de Sussex abandonó Londres inmediatamente después de asistir a la ceremonia de entronización para regresar a Estados Unidos junto a su familia en un día tan señalado para ellos.
Según afirmó hace unos días una fuente próxima a los duques de Sussex, la idea era hacer "una fiesta discreta en casa", con algunos amigos y allegados a la pareja, la madre de Meghan, Doria Ragland (66) y varios compañeros de colegio de Archie.
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Ahora se sabe también que, además de celebrar el aniversario de su retoño, la duquesa de Sussex salió a pasear por los alrededores de su residencia en Montecito, pocas horas después de haberse perdido el que sin duda fue el evento del año en Reino Unido.
Según consta en las fotos publicadas por Daily Mail, la protagonista de Suits caminó ataviada con un cómodo look deportivo presidido por una chaqueta J. Crew, un chaleco negro ajustado, unos leggings negros y botas de montaña marrones. Combinó el atuendo con un sombrero de ala ancha y un elegante reloj Cartier de 20.000 euros que perteneció a su difunta suegra, la princesa Diana de Gales.
Durante el paseo, Markle estuvo acompañada por varias personas entre las que se encontraban su instructora de pilates, Heather Dorak, con la que mantiene una estrecha relación desde hace años y a menudo se le ve compartiendo momentos por Los Ángeles. De hecho, las dos solían aparecer juntas en las redes sociales de Markle antes de que la duquesa cerrara sus perfiles personales tras casarse con el príncipe Harry.
Cabe recordar que el príncipe Archie y la princesa Lilibet estuvieron por última vez en el Reino Unido en junio de 2022, durante las celebraciones del Jubileo de Platino de Isabel II. Aquel viaje supuso la primera ocasión en la que la hija menor de los Sussex, que nació en California en junio de 2021, ponía un pie en el país que ya casi hace cuatro décadas vio nacer a su padre. Archie, que nació en el Reino Unido, no había regresado a Inglaterra desde finales de 2019.
Por su parte, la última ocasión en la que pudo verse a Meghan Markle compartiendo espacio con su familia política fue el pasado mes de septiembre, durante el funeral de Estado de Isabel II, en el que se mostró visiblemente conmovida junto al féretro de la abuela de su esposo.