Omid Scobbie (42 años) se ha propuesto ser el escritor del momento y armar polémica con el lanzamiento de su libro, Endgame, Inside the Royal Family and the Monarchy's Fight for Survival. El experto en Casas Reales lo lanzó al mercado este pasado 28 de noviembre y, desde entonces, el debate de sus declaraciones y análisis sobre la Familia Real británica ha sido una constante.
Ahora, el editor de la revista Harper's Bazaar se enfrenta a muchas disputas relacionadas a su obra. Una de ellas es sobre la investigación de la brecha del príncipe de Gales, Guillermo (41), con su hermano menor, Harry (39), antes y después de su salida de la Casa Real en 2020 y de comenzar una nueva vida en Estados Unidos con Meghan Markle (42).
Un asunto que revolucionó tanto a nivel nacional como internacional y que el heredero al trono cree que al duque de Sussex le ha lavado el cerebro "un ejército de terapeutas" hasta tal punto en el que ya ni siquiera "reconoce a su propio hermano", apunta una fuente al autor de la obra. Antes, su pensamiento no era el mismo.
Hace un tiempo, Guillermo desveló a Omid que "en realidad, me encanta tenerlo cerca", refiriéndose a Harry, durante una recepción privada en el palacio de Kensington. El escritor cree que el hecho de tener que caminar detrás del féretro de su madre, Lady Di, en 1997, "sin duda consolidó la conexión entre ambos".
El autor del libro vislumbra un cambio sustancial en el comportamiento de William allá por 2019. "Sus amigos e incluso Harry así lo han descrito", apunta. "Para los que le han seguido su carrera real durante años, hasta su cara cuenta la historia: hay menos sonrisas y su mandíbula frecuentemente desencajada sugiere que las tormentas internas podrían estar tapando su lado más soleado", continúa Omid.
Él mismo lo ha vivido. Pasó de ser "una cara amable" en los eventos royals a ser percibido como el "enemigo" debido a su "relación profesional" con los duques de Sussex. Tal es su unión con los duques que Omid es uno de los autores del libro Finding Freedom, la famosa biografía del matrimonio que en España se tituló Harry y Meghan, en libertad.
Esa amistad que Omid empezó a mantener con los duques afectó a su contacto con el equipo del príncipe de Gales. Una vez, Christian Jones, jefe de prensa del palacio de Kengsinton, se acercó a decirle que "ya no sería apropiado socializar" con el hijo de Carlos III (75) ya que al propio Guillermo se le hacía "incómodo", le revelaron sus ayudantes.
Meghan, la Corona y el distanciamiento
Guillermo quería romper con todo lo relacionado a su hermano pequeño. En 2020, el distanciamiento del príncipe y Harry se hizo evidente. ¿El motivo? El periodista observa que se debe a la actitud de Meghan, que poco se acercaba a la establecida por la Corona británica y a su regla no escrita: "Never complain, never explain", es decir, "Nunca te quejes, nunca te expliques".
"Según Harry, Guillermo, en pleno 'modo heredero', estaba allí para 'imponer la ley' sobre Meghan y su 'difícil' comportamiento", apunta Scobie. Una discusión que el mismo Harry confesó en su libro Spare que acabó con una agresión que sufrió por parte de su hermano, Guillermo, tras una fuerte disputa en la que la actriz de Suits fue protagonista. "Me agarró por el cuello, rasgó mi collar... Y me tiró al suelo. Todo sucedió tan rápido. Muy rápido. Aterricé en el plato del perro que se partió debajo de mi espalda, los pedazos me cortaron. Me quedé allí por un momento, aturdido, luego me puse de pie y le dije que saliera", contaba Harry en su libro.
"Uno no espera este tipo de comportamiento del futuro Rey y cabeza de Inglaterra, que por aquel entonces tenía 37 años", aporta Omid, que también considera que "se necesitaría un psicoanalista altamente capacitado para llegar a la cúspide de la ira del príncipe Guillermo. Obviamente, su relación rota con su hermano encabeza la lista".
Y es que, desde que Harry comenzó su romance con la estadounidense, Guillermo "pronto expresó su preocupación de que él se estaba moviendo demasiado rápido con alguien que había vivido una vida tan alejada de la de su hermano", explica. Para el futuro monarca, Meghan era la encarnación viva de una "forastera", señala una fuente al autor, y creía que Harry "se dejaba llevar por su glamour y su alegría de vivir americana".
Los dramas internos de los nietos de Isabel II no tardaron en llegar a al prensa. Fue tal el escándalo que el Rey, según Omid, intentó mediar entre ambos, instando a Guillermo y a Kate Middleton (41) a que "acogieran" a los duques de Sussex, sin éxito.
"Guillermo dejó de actuar como un hermano y se convirtió más en alguien sólo centrado en la Corona", le informó una fuente cercana a Harry y Meghan. Un pensamiento que Omid comparte y que asegura que se debe a su papel como futuro soberano del país mientras intenta luchar "con el implacable equilibrio entre la vida laboral y la personal", interpretando siempre su "personaje real" cuidadosamente tratado por el bien de la monarquía británica.