Harald V de Noruega está de celebración. Este miércoles, 21 de febrero, el Rey cumple 87 años con la agenda despejada y fuera de las fronteras del país nórdico. Mientras, es su hijo y príncipe heredero, Haakon (50), quien asume el rol principal de la Corona y acude a los deberes reales como futuro monarca.
Tal y como informan los medios locales, el monarca se encuentra fuera del país escandinavo por un viaje privado en el extranjero y se ha tomado unas vacaciones lejos de su reino para conmemorar tan significativa fecha. Sin embargo, no se ha especificado el destino en concreto ni cuántos días durará este descanso ni si viaja acompañado de su familia. Además, algunas ciudades del país izarán la bandera y sonarán los cañones en honor al cumpleaños del Rey.
Aunque no se sabe la fecha de regreso de Harald, sí se conoce cuándo y cuál será el primer acto que cubrirá. No será hasta el 8 de marzo, cuando celebre una reunión de gabinete en el Palacio Real sobre las 11 horas en la que también estará presente Haakon.
Hasta entonces, es el propio vástago menor de Harald y de la reina consorte, Sonia (86), quien actúa como regente. Un total de seis actividades son las que liderará hasta el regreso de su progenitor. Las dos primeras tendrán lugar el próximo 26 de febrero, día en que tiene pendiente una audiencia de despedida al embajador de Tailandia, Vimolbajra Ruksakiati, y otra audiencia con el Jefe del Ejército. La última, el 7 de marzo, cuando se reunirá con el Ministro de Asuntos Exteriores.
Su hermana mayor, Marta Luisa (52), cuarta en la línea de sucesión al trono noruego por detrás de su hermano menor y sus sobrinos, Ingrid Alexandra (20) y Sverre Magnus (18), completará uno de esos actos con su presencia y el séptimo compromiso lo llevará a cabo la princesa Astrid (92), hermana mayor de Harald. Ya el día 9 y 10, la Familia Real estará presente durante la Copa del Mundo de esquí en Holmenkollen.
Problemas de salud
No es la primera vez que el soberano tiene que ausentarse de sus obligaciones, ya sea por su cumpleaños -como hizo en 2022- o por sus muchos baches de salud que le han obligado a estar alejado de la vida oficial. Y es que, desde que era joven, este Rey de la mala salud de hierro que se niega a abdicar y el más veterano de los europeos ha ido arrastrando enfermedad tras enfermedad.
Todo comenzó en 1999, cuando tuvo que pasar por quirófano para eliminar una mancha de su mejilla. Cuatro años después, en diciembre de 2003, la Casa Real anunciaba que padecía cáncer de vejiga. A principios de 2004 retomó sus funciones, aunque no por mucho tiempo. Sólo pasó otro año y el Rey volvía a ser intervenido quirúrgicamente debido a una enfermedad cardíaca.
Pasaron 12 años con aparente normalidad, hasta que en 2017 ingresó en el Rikshospitalet a causa de una infección. El 2019 volvía a estar de baja como consecuencia de una enfermedad vírica y en 2020 la salud de Harald daba de qué hablar tras ser ingresado hasta en tres ocasiones y ser operado del corazón para realizarle un cambio de válvula en el órgano vital que se le implantó en 2005.
Ya en el mes de marzo de 2022 su salud volvió a verse comprometida y, después de varios meses presentando síntomas de resfriado, dio positivo en Covid. En agosto, de nuevo tuvo que ingresar en el hospital, aquejado de fiebre. Sin embargo, su annus horribilis -por el momento- fue 2023.
En mayo del año pasado, otra infección llegó a su vida y, en junio, sufrió una aparatosa caída durante su visita oficial a Dinamarca al tropezar con un escalón a pesar de ir apoyado en muletas. No bastante con eso, en octubre volvió a dar positivo en Covid, protagonizando otro susto en su salud. Durante todas estas bajas y enfermedades, ha sido su hijo quien siempre le ha sustituido.
El último revés de salud hasta la fecha ocurrió ya entrados en 2024, en concreto, el pasado 31 de enero, cuando Casa Real informó de que el Rey estaría de baja durante cuatro días debido a una infección respiratoria.