Malas noticias desde Noruega. El rey Harald V (87 años) ha ingresado de urgencia en un hospital de Malasia mientras se encontraba de vacaciones por su cumpleaños. La Casa Real ha informado este martes, 27 de febrero, que fue hospitalizado debido a una infección, y que está recibiendo un "buen seguimiento" por parte del personal médico.
"Su Majestad el Rey ha caído enfermo durante sus vacaciones en Malasia y está hospitalizado allí por una infección. El Rey recibe un seguimiento por parte del personal médico tanto de Malasia como de Noruega", señala el comunicado.
Fue el pasado 21 de febrero cuando el soberano alcanzó los 87 años y decidió cruzar las fronteras del país nórdico para celebrar esta fecha tan significativa. Mientras, ha sido su hijo y príncipe heredero, Haakon (50), quien ha asumido el rol principal de la Corona y ha acudido a los deberes reales como futuro monarca.
Según la agenda, estaba previsto que Harald retomara sus compromisos oficiales el próximo 8 de marzo, cuando estaba agendada una reunión de gabinete en el Palacio Real sobre las 11 horas a la que también acudiría Haakon. Por el momento, este evento sigue en pie.
No es la primera vez que el soberano cae enfermo debido a sus múltiples baches de salud que le han obligado a estar alejado de la vida oficial. El último tuvo lugar el pasado 31 de enero, cuando Casa Real anunció que el Rey estaría de baja durante cuatro días debido a una infección respiratoria.
Sin embargo, desde que era joven, este Rey de la mala salud de hierro que se niega a abdicar y el más veterano de los europeos ha ido arrastrando enfermedad tras enfermedad.
Hay que remontarse a 1999, fecha en la que tuvo que pasar por quirófano para eliminar una mancha de su mejilla. Cuatro años después, en diciembre de 2003, la Casa Real anunciaba que padecía cáncer de vejiga. A principios de 2004 retomó sus funciones, aunque no por mucho tiempo. Sólo pasó otro año y el Rey volvía a ser intervenido quirúrgicamente debido a una enfermedad cardíaca.
Pasaron 12 años con aparente normalidad, hasta que en 2017 ingresó en el Rikshospitalet a causa de una infección. El 2019 volvía a estar de baja como consecuencia de una enfermedad vírica y en 2020 la salud de Harald parecía volver a complicarse: era ingresado hasta en tres ocasiones y tuvo que ser operado del corazón.
Ya en marzo de 2022 su salud volvió a verse comprometida y, después de varios meses presentando síntomas de resfriado, dio positivo en Covid. En agosto, de nuevo, tuvo que ingresar en el hospital, aquejado de fiebre. 2023 volvió a ponérselo difícil a Harald.
En mayo del año pasado, otra infección llegó a su vida y, en junio, sufrió una aparatosa caída durante su visita oficial a Dinamarca al tropezar con un escalón a pesar de ir apoyado en muletas. No bastante con eso, en octubre volvió a dar positivo en Covid, protagonizando otro susto en su salud. Durante todas estas bajas y enfermedades, ha sido su hijo quien siempre le ha sustituido.