El rey Carlos III (75 años) ha asistido este miércoles 17 de julio a la apertura del parlamento en el Palacio de Westminster. Lo ha hecho junto a su esposa, la reina Camila (77), siendo la tercera vez que el Rey asiste a este evento, que tiene lugar en la Cámara de los Lores del Palacio. Un encuentro en el que el monarca británico ha pronunciado un discurso en el que describe la agenda del Gobierno de cara a la nueva temporada. 

Se trata de uno de los eventos más importantes en Reino Unido al ser de las pocas ocasiones en el que las tres partes constituyentes del Parlamento están presentes al mismo tiempo: el soberano, la Cámara de los Lores y la Cámara de los Comunes. Además, en esta ocasión es aún más especial al coincidir con el 77 cumpleaños de la reina Camila, que ha vivido su segundo año como Reina Consorte con la apertura estatal del Parlamento. 

La apertura del Parlamento viene marcado por el inicio del primer discurso laborista de Carlos III. Un evento que ha causado máxima expectación este año porque hace apenas dos días, el Rey y la reina Camila tuvieron que ser evacuados de una exposición al aire libre durante una visita a la isla de Jersey, en el canal de la Mancha, por un fallo de seguridad que, finalmente, se confirmó como una "falsa alarma".

Aunque es la tercera ocasión que el rey Carlos III lleva a cabo esta función, ha sido la primera inauguración de Estado con el gobierno laborista del primer ministro Keir Starmer (61) en el poder, tras 14 años de un gobierno conservador. En mayo de 2022, el Rey se unió a su hijo, el príncipe Guillermo (42) para sustituir a la reina Isabel II, que no pudo asistir a la inauguración de Estado por problemas de salud. Ya el año pasado, Carlos III regresó solo como nuevo monarca británico tras la muerte de Isabel II en septiembre de 2022. 

Para la apertura del Parlamento, el rey Carlos III ha llegado con el uniforme de la Marina Real, y minutos más tarde lo ha cambiado por la Toga de Estado del parlamento y la clásica Corona Imperial. Inmediatamente, ha procedido a leer el dicurso elaborado por el nuevo primer ministro, Keir Stramer. Un escrito marcado por la incorporación de un gobierno laborista después de 14 años y cuyos principales planes se centrarán en "arreglar los cimientos de la nación", algo de lo que son conscientes que "no se arreglará de un día para otro". 

La reina Camila, por su parte, se ha mostrado una vez más con su característica sonrisa y ha asistido a la ceremonia con su vestido de coronación color marfil. Además, lució la espectacular diadema de Jorge IV, decorada con más de 1.000 diamantes y 169 perlas blancas. En la parte superior, la corona de oro y plata presenta ramos de rosas, cardos y tréboles, que representan los símbolos florales de Inglaterra, Escocia e Irlanda, respectivamente.

De la misma forma, Camilla también lució varias de las joyas de la corona en la ceremonia, incluida la diadema de diamantes, que solo aparece en ocasiones de estado, y el collar de la coronación. Originalmente encargado para la reina Victoria en 1858, el collar, que cuenta con 28 diamantes, ha sido usado por todas las reinas desde la reina Victoria el día de su coronación.