Continúa el flujo de noticias del caso de Marius Borg (27 años), hijo de Mette-Marit de Noruega (51). Lejos de quedar en un suceso aislado, cada pocos días salen nuevas informaciones que sitúan en una peor posición tanto al principal implicado como al resto de sus familiares.
Hace solo unos días, el heredero al trono nórdico, Haakon de Noruega (51), afirmaba que no era "natural ni correcto" que se entrase en el asunto. Pero parece que ya no va a poder esquivarlo más después de las últimas informaciones que se han conocido en estas últimas horas.
Este sábado, 14 de septiembre, se conocía que el primogénito de la princesa había vuelto a ser detenido en Oslo después de saltarse la orden de alejamiento con una de sus exnovias y víctima. Pasó la noche en dependencias policías y fue puesto en libertad, pero con más cargos. Ahora se han vuelto a saber detalles de esta detención que preocupan a los noruegos.
El medio de comunicación noruego TV2 ha dado a conocer que en el registro que se realizó a Marius Borg fueron encontradas armas ilegales y drogas. La detención se produjo cuando la policía recibió una orden del tribunal del distrito de Oslo por violara una orden de alejamiento al llamar por teléfono, con número oculto, a la víctima.
En el momento del registro, el joven se encontraba de viaje junto a unos amigos para cazar. Su abogado, Øyvind Bratlien, ha negado que llevase armas consigo en el momento de la atención. Tal y como señala el citado medio, el fiscal no ha querido dar más detalles sobre lo que se encontró en la actuación policial, evitando así confirmar o desmentir la información.
Cabe recordar que Marius Borg aseguró en el comunicado emitido tras su primera detención que iba a tomar cartas en el asunto por el abuso de sustancias. Aquí confirmó que llevaba tiempo tomando drogas a causa de desafíos y trastornos. "He estado en tratamiento en el pasado. Ahora retomaré este tratamiento y lo tomaré muy en serio", aseguró en aquel momento.
Sin embargo, las informaciones de las últimas horas confirman que no lo ha hecho y que sigue dependiendo de las drogas. Las cosas se le complican a Marius Borg y su familia, que ha intentado mantenerse al margen estas semanas, tendrá que dar un paso al frente para evitar problemas mayores.
Ya son tres las chicas, todas exnovias, que le han denunciado por abusos físicos y psicológicos durante sus relaciones. Todo estalló el pasado mes de agosto, cuando fue detenido tras protagonizar una violenta pelea con su novia. Pidió perdón, pero ha demostrado que estas palabras no tienen ningún peso.
Fue a principios de septiembre cuando se acordó la imposición de una orden de alejamiento contra su exnovia por repetidos acercamientos no deseados. Solo cinco días después se la saltó, momento en el que se solicitó su detención.
A pesar de no formar parte de la familia real noruega, al ser fruto de una relación anterior de la princesa con su expareja, siempre ha sido tratado como uno más. Parece que su relación actual con el heredero al trono no está atravesando su mejor momento después de actitudes sucedidas en los últimos años. Estas últimas noticias vuelven a poner a la monarquía en el ojo del huracán.