El rey emérito Juan Carlos I (86 años) ha recibido este pasado domingo, 29 de septiembre, en Sanxenxo (Pontevedra) una gran alegría. En medio del escándalo por sus controvertidas fotografías con Bárbara Rey (74), el padre de Felipe VI (56) ha sido premiado con la primera medalla de oro que concede la Real Federación Gallega de Vela.
La entrega de esa distinción ha sido la sorpresa de la ceremonia de entrega de premios de la IX Regata Rey Juan Carlos–El Corte Inglés Máster, donde el Emérito ha sido recibido con aplausos.
Antes de que se efectuara la ceremonia, se ha guardado un minuto de silencio por el matrimonio de Sanxenxo que perdió la vida este pasado sábado, día 28, en un accidente de tráfico en la localidad pontevedresa.
Juan Carlos I, emocionada tras recibir la primera medalla de oro que otorga la Federación Gallega de Vela.
A continuación, el presidente de la Federación Gallega de Vela, Manuel Villaverde, ha sido el encargado de entregar la medalla de oro a Juan Carlos I, una distinción que se le ha concedido al exjefe del Estado por ser "deportista, promotor y embajador del deporte en todo el mundo", y por haber navegado, además, bajo la grímpola de un club gallego como el Real Club Náutico de Sanxenxo.
El rey emérito ha estado en todo momento sentado sobre un taburete por sus problemas de movilidad. Cercano y relajado, Juan Carlos ha derrochado simpatía con los galardonados, especialmente con unos niños y un joven con Síndrome de Down.
Al acto han asistido el conselleiro de Mar, Alfonso Villares, tras haber participado en el retiro de la Xunta este fin de semana en Sober (Lugo); el presidente de la Diputación de Pontevedra, Luis López; el secretario xeral para el Deporte, José Ramón Lete Lasa, y el alcalde de Sanxenxo, Telmo Marín, además de los representantes de los patrocinadores de la regata, El Corte Inglés y Abanca.
Una vez concluida la entrega de premios, el Emérito ha abandonado el Club Náutico de Sanxenxo vitoreado y aplaudido por varias personas, que no han dudado en mostrarle su apoyo incondicional al grito de '¡Viva España!'.
Juan Carlos, sonriente minutos antes de recibir el premio.
El Bribón, que el pasado sábado contó con el rey Juan Carlos a bordo, se adjudicó la regata en la clase 6 Metros, en la que, a partir de este lunes, intentará revalidar el campeonato de Europa en el mismo campo de regatas.
Los dos terceros puestos que sumó el barco del Náutico de Sanxenxo, en la segunda y última jornada de competición, fueron suficientes para llevarse la regata con una ventaja de seis puntos sobre el segundo clasificado, el finlandés Astree III, de Oissi Paija. El podio lo completó el Aida de Javier de la Gándara.
En la categoría Open, el Stella de Violeta Álvarez, del Náutico de Sanxenxo, consiguió asegurarse el triunfo con un cuarto y un segundo puesto anotados este sábado, para acabar con cinco puntos de renta sobre el griego Aera de Fotis Lykiardopulo, del R. Yacht Squadron. Este domingo, el Mirfak, de la Comisión Naval de Regatas de Ferrol, certificó su triunfo en ORC 0-1-2 y el Travesio, de Sanxenxo, en ORC 3-4.
Esta distinción que ha alegrado sobremanera a Juan Carlos acontece después de que el pasado viernes, 27 de septiembre, el monarca se reencontrara en la Escuela Naval de Marín con su nieta, la princesa de Asturias Leonor de Borbón (18), y con los reyes de España, Felipe VI y Letizia (52).
Tal y como pudo conocer EL ESPAÑOL, el encuentro "privado y familiar", "estaba planeado, pedido el permiso y tenía el beneplácito de Zarzuela, hasta el punto de que allí también se encontraban los reyes, Felipe y Letizia porque celebran, esta noche en una cena privada, el 40 aniversario de la jura de bandera del rey en la Armada".
Se pudo conocer que el encuentro entre los cuatro se produjo en privado, en los despachos del centro de estudios militares. Pudieron charlar un rato de forma cordial y amistosa.