El Castillo de Windsor es una de las instituciones más importantes para la Familia Real de Inglaterra. Sin él, la historia de la Corona británica se hubiera escrito de otra forma, pues fue el refugio de fin de semana favorito de la reina Isabel II durante la mayor parte de su reinado y su residencia principal desde 2011 hasta su muerte.
Sin embargo, varios han sido los incidentes que han ocurrido en su interior. El último, el pasado domingo, 17 de noviembre, cuando unos ladrones enmascarados asaltaron el castillo con el fin -según apuntan medios británicos- de robar vehículos agrícolas. Afortunadamente, tanto los príncipes de Gales, Guillermo de Inglaterra (42 años) y Kate Middleton (42), como sus tres hijos, George (11), Charlotte (9) y Louis (6), dormían a escasos metros, en Adelaide Cottage, y todo quedó en un "susto".
Mientras esto sucedía, los reyes, Carlos III (76) y Camila (77), se encontraban en Escocia, y apenas unas horas antes una nueva oferta en el Castillo de Windsor salía a la luz. Una vacante que coincide con uno de los momentos más convulsos del reconocido lugar y de la que muchos medios británicos se han hecho eco, asegurando que "la seguridad en el castillo necesita ser reforzada".
El nuevo puesto ofrecido por Carlos III tiene como objetivo principal garantizar el mantenimiento adecuado de la residencia real, incluyendo desde la limpieza y el cuidado de las estancias del castillo a la conservación de las obras de arte que adornan las salas y gestión de las tareas domésticas cotidianas.
La posición ofrecida es a tiempo completo, cuenta con una jornada laboral de 40 horas semanales. Si bien el salario específico no ha sido detallado en la nueva convocatoria, lo cierto es que medios como The Sun han señalado que podría estar en torno a las 22.000 libras esterlinas anuales -aproximadamente 26.000 euros brutos al año-. De momento, la Casa Real no ha vuelto a dar más detalles sobre la cuantía económica a pagar.
Algunos de los beneficios que incluye serían los 25 días de vacaciones anuales, excluyendo los fines de semana. Además, se concede un plan de pensiones no contributivo a la persona que finalmente sea seleccionada.
Más allá de los permisos retributivos, otro de los aspectos positivos que tiene la oferta es que el personal seleccionado cuenta con un almuerzo gratuito durante la jornada laboral. Ligado a este asunto, la Casa Real incluye en la vacante su compromiso constante con la sostenibilidad, remarcando su política de evitar el desperdicio de alimentos y garantizando que las comidas se preparen de manera equilibrada y justa.
Otro factor relevante a tener en cuenta antes de aplicar esta oferta es que ofrece apoyo psicológico continuado, con el objetivo de proporcionar a los empleados un entorno laboral saludable y de pleno bienestar. Además, la jornada de trabajo será flexible, pese a estar sujetos a las normas internas del equipo.
La oferta de trabajo estará activa hasta el próximo domingo, 24 de noviembre y, aunque de momento no se conoce el importe exacto mensual, lo cierto es que las condiciones de la nueva vacante podrían indicar que será ocupada próximamente.
Se trata de un nuevo puesto de trabajo que tiene lugar en un momento un tanto complicado para el Castillo de Windsor tras los incidentes ocurridos el pasado 17 de noviembre. Es más, medios británicos como el Daily Mail han apuntado que la seguridad royal debería ser revisada próximamente.
En las últimas horas, además, ha aparecido una nueva oferta de trabajo en la página web oficial de la Casa Real británica. En esta ocasión, la vacante sería para ser asistente de ama de llaves y cuyas condiciones destacan por su alto salario anual -32.000 euros anuales aproximadamente-, trabajando 40 horas semanales y con dos días de descanso.
Cambios tras la muerte de Isabel II
Tras el fallecimiento de la reina Isabel II en septiembre de 2022, Carlos III tuvo que comenzar a hacer frente a algunos cambios antes de su reinado. Uno de los más destacados fue la renovación del personal, llegando a intentar prescindir de hasta 100 trabajadores que regentaban las inmediaciones del castillo.
Más tarde, el equipo del rey emitió un comunicado reconociendo los cambios, pero aseguraron que ningún trabajador se iba a quedar sin su correspondiente indemnización.