No es Matt Damon de mayor, es Brian Cullinan, el culpable del patinazo de los Oscar
Está casado, tiene tres hijos, reside en una lujosa mansión de tres millones de dólares en Malibú y es alto directivo de PwC
2 marzo, 2017 01:07Noticias relacionadas
Ha sido uno de los personajes de la semana por el error sin precedentes que cometió durante la gala de los Oscar. Brian Cullinan (57 años), quien entregó el sobre erróneo con el nombre de la cinta ganadora como mejor película en los premios de la Academia de Hollywood, se ha convertido de repente en uno de los hombres más famosos y buscados de los últimos días.
El gran público hasta ahora nunca había escuchado su nombre, pero para los fans de la gran fiesta del cine estadounidense Brian ya era una persona familiar. En 2016 se hizo viral una fotografía de él con Matt Damon (46) con el que guarda un gran parecido físico. Tanto es así, que en su oficina se le conoce como el 'lookalike' (doble) del actor. Después de la equivocación del contable de PricewaterhouseCoopers (PwC) este pasado domingo en los Oscar el intérprete de El caso Bourne se ha visto involucrado en los chistes que se han hecho sobre Brian. Es como si Matt Damon pudiera hacerse una idea de cómo será dentro de unos años al ver el rostro de Cullinan.
Al margen de las comparaciones, poco se conoce de la vida privada del que se ha encumbrado como uno de los protagonistas de los Oscar. Casado desde 1988 con su esposa Andrea, es padre de tres hijos (una niña llamada Bree y dos hijos Brett y Drew). La familia vive en Malibú en una casa de tres millones de euros, a la que llegó después de residir en Nueva York donde se graduó en la Universidad de Cornell después de haber estudiado psicología y obtener un máster en contabilidad en la Universidad de Northeastern. Aquí es donde comienza su trayectoria profesional en PwC donde cuenta con más de 30 años de experiencia en servicios de contabilidad, de auditoría y de asesoramiento empresarial técnicos par algunas de las mayores y más complejas multinacionales.
La primera vez que acudió a los Oscar fue en 2014 siendo parte del equipo de votación de liderazgo. Desde entonces ha sido uno de los responsables del recuento de votos de los más de 6.000 miembros de la Academia de las Ciencias y las Artes Cinematográficas, organismo del que a su vez es uno de los socios principales. Confesó en una entrevista que su trabajo es muy serio e intenso y que ya está acostumbrado a que las estrellas le intenten sacar información en la alfombra roja para que revele los resultados antes del espectáculo. En 2014 Cate Blanchett intentó robarle de broma el maletín con los nombres de los galardonados. Horas después la intérprete de El curioso caso de Benjamin Button se alzaba con la estauilla dorada como mejor actriz por Blue Jasmine de Woody Allen (81). Samuel L. Jackson (68) también le paró en una ocasión en un photocall y John Travolta (63) y su mujer Kelly Preston (54) le pidieron una vez un selfie.
Esas mismas estrellas que buscan a Brian son las mismas por las que él se deja deslumbrar. En sus redes sociales es habitual encontrar imágenes suyas con personajes del star system como Sofía Vegara (44), Oprah Winfrey (63) o Meryl Streep (67). De hecho, el error con los sobres en los Oscar se desencadenó por un despiste del contable de PwC al estar fotografiando a Emma Stone (28) con su premio como mejor actriz.
Enseguida eliminó el tuit de su perfil social para que nadie para que nadie repara en ello. Brian Cullinan parece que estuvo más pendiente del backstage que del escenario. La organización había pedido previamente que estuvieran pendientes únicamente de los sobres y no de los teléfonos móviles. Su futuro ahora está en el aire. De momento ni la Academia de Cine ni la compañía para la que trabaja y para la que sirve como presidente su Consejo se ha pronunciado sobre qué pasará con Brian después de su gran error.