El actor estadounidense Tom Sizemore habría abusado sexualmente de una actriz de 11 años en el año 2003 durante el rodaje de una película. Una agresión sexual que obligó a los responsables del filme a prescindir de los servicios del intérprete de manera temporal. Todo un escándalo que no ha hecho más que cobrar fuerza a la luz de las víctimas de agresión sexual que han salido en los últimos meses.
En esta ocasión, ha sido el medio especializado The Hollywood Reporter quien ha informado de este incidente tras hablar con una docena de actores y profesionales involucrados en la producción del largometraje en el que se produjo. La supuesta víctima, quien tan solo ha accedido a romper su silencio bajo la condición de anonimato, argumenta que recientemente ha contratado a un abogado para averiguar si podría emprender acciones legales contra Sizemore. En lo que respecta al actor, a través de su agente Stephen Rice, ha declinado hacer cualquier tipo de valoración sobre las acusaciones.
La presunta agresión tuvo lugar durante el último tramo del rodaje del filme Born Killers (2005) del director Morgan J. Freeman, cuando en un momento en el que la niña tenía que sentarse sobre el regazo de Sizemore este, supuestamente, le restregó o le introdujo un dedo en su vagina. Tras saltar el escándalo sexual, Sizemore fue apartado inmediatamente de la producción para regresar meses más tarde después de que los padres de la joven actriz decidieran no presentar cargos.
Un largo historial con las drogas y la ley
Tom Sizemore cuenta en su haber con un largo historial de problemas con las drogas y con la ley, que incluye varios arrestos y condenas por violencia machista. Precisamente, fue el mismo año en el que habría abusado de la joven, en 2003, cuando el intérprete fue condenado por agredir a su expareja Heidi Fleiss, mientras que en el 2009 fue también acusado de haber maltratado a su novia. El año pasado fue, asimismo, detenido después de que su pareja actual le denunciara por haberla golpeado en la cabeza. Parece ser que el escándalo sexual no cesa después de que Harvey Weinstein abriera la veda.
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