Román Abramóvich (51 años) firmaba en agosto del año pasado el divorcio más caro de la historia. La que fue su tercera separación se convirtió en la ruptura más mediática en el panorama de las celebrities internacionales, igual que las dos anteriores. La intensa vida sentimental del oligarca ruso ha copado los titulares del papel couché de todo el mundo, igual que lo ha hecho cuando sus exmujeres han hablado de él.
La última en hacerlo ha sido Irina Malandina (51), su segunda esposa, a la que engañó con su tercera mujer -antes de serlo- y con quien firmó un divorcio de 165,52 millones de euros. La mujer no ha querido extenderse en sus declaraciones sobre el que fuera su pareja y con quien tiene cinco hijos.
Román Abramóvich e Irina Malandina en una imagen de archivo.
Fuentes cercanas al magnate ruso han explicado a los medios ingleses que, el alto precio a en sus divorcios tiene una compensación muy importante para él: salvaguardar su vida y conseguir el silencio de sus parejas. El magnate, que acumula una fortuna de 7.724 millones de euros, no tiene la misma buena suerte en el amor.
Las mujeres de Roman Abramovich han sido tan importantes como sus millonarios divorcios. La tercera y última separación del oligarca se convirtió en uno de los momentos más importantes de su vida sentimental. Él y Dasha Zhukova (36) se conocieron en la segunda boda de él. Tres años después pasaron ellos dos por el altar para, una década más tarde, firmar el divorcio más caro de la historia.
La pareja decidió no hacer público su matrimonio y mantenerlo en secreto durante seis años, cuando aparecieron las primeras imágenes de ambos en un artículo del Wall Street Journal.
En agosto de 2017 Roman Abramovich y Dasha Zhukova, que tuvieron dos hijos, anunciaron su separación amistosa a través de un amplio comunicado en el que explicaban que "continuarían trabajando juntos como cofundadores de Garage".
La primera esposa del feroz empresario fue, en un principio, la más desconocida pero acabó convirtiéndose en la máxima fuente de información para la prensa inglesa. "Le gusta que le digan que él es el jefe, que es único y el más maravilloso. Y, mientras te quiere, se queda contigo. La pregunta es: ¿por cuánto tiempo?", confesó Olga Yúrievna una entrevista al Daily Mail en una entrevista en 2007.
La veterana y el magnate estuvieron casados menos de tres años, una relación que se fraguó a finales de los años 80 y que consiguió hacerse con la vivienda en común tras firmar su separación.
[Más información: Roman Abramovich y Dasha Zukhova, el divorcio más caro de la historia]