Flavio Briatore (68 años) vuelve a estar en el punto de mira. En esta ocasión debido a sus últimas declaraciones sobre su hijo de 8 años, fruto de su matrimonio con la modelo Elisabetta Gregoraci (38). El empresario ha sorprendido con afirmaciones como "Mi hijo no irá a la universidad, y seré yo el que le forme". Tiene muy claro cómo será el futuro de su pequeño, Nathan Falcó, y ambos ya han hablado sobre ello: "Sabe que a los 14 años irá a un colegio de Suiza. Después de obtener el diploma vendrá a trabajar conmigo". 

El controvertido empresario asegura que no es necesario tener una licenciatura para él sino más tener a alguien de su confianza que gestione o lidere sus empresas: "No veo la razón para que vaya a la universidad. Si uno tiene una vocación, debe ser libre para seguirla, pero a mi no me sirve un licenciado". En declaraciones a Oggi, el exnovio de Heidi Klum (45) y Naomi Campbell (48) comentaba: "Si necesito un economista o un abogado, le llamo y le pago la minuta". 

Flavio Briatore subía a su cuenta personal de Instagram esta fotografía con su hijo Falco, añadiendo lo siguiente: "Me gustaría recordarle a @massimogramellini que él nunca se graduó, según Wikipedia. La universidad es un estacionamiento sin futuro. Los padres, sin saber dónde colocarlos, los inscriben en facultades extrañas donde tienen profesores como niñeras. ¡Entonces aprenden cosas que no serán útiles en la vida a menos que tengan un tío o un primo en el @corriere!", refiriéndose a un enchufe.

Y es que, según Briatore, además, muchos chavales acuden a la universidad no porque ellos quieran realmente sino "para complacer a los padres o por escuchar que les llamen doctor", lo que viene a decir, que hay necesidad de 'titulitis'. Después de su experiencia, cree que es mejor empezar a trabajar a los 18 años que comenzar a los 25 tras "tener una licenciatura inútil", como lo califica al medio italiano. El dueño de Billionaire considera que hay mucha gente que estudia una carrera por encima de lo que aquí conocemos como módulos profesionales, o formación profesional para la gente que estudió en su día EGB. "El mundo necesita fontaneros y electricistas", reflexionaba el multimillonario italiano.

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