Celebridad, empresaria y reina por antonomasia de los selfies. Así es Kim Kardashian, un icono de la era instagrammer que este miércoles cumple 40 años envuelta en el halo de extravagancia y ostentosidad que la caracteriza, y en una celebración de cumpleaños que viene con lanzamiento de colección de maquillaje incluida.
Para Kim Kardashian el combo perfecto para alcanzar el éxito se encuentra en combinar su vida personal con sus proyectos profesionales, algo que, además de hacerse evidente por el conocido reality televisivo sobre su vida Keeping up with the Kardashians, pone de manifiesto una vez más al aprovechar la fecha de su 40 cumpleaños para lanzar su nueva línea de maquillaje.
Polémicas y escándalos como bandera, una capacidad inigualable de acaparar cámaras a través de sus estilismos más arriesgados, instaurar las normas no escritas sobre cómo posar en selfies o dictar las tendencias de maquillaje del momento, siendo responsable de, entre otras, modas como el counturing, el uso de pestañas postizas XL o los labiales mate, la ostentosidad es, para Kim Kardashian, su mayor baza.
Kimberly Noel Kardashian West es el verdadero nombre de la multifacética celebridad estadounidense, que ejerce tanto de modelo como de empresaria y reconocida influencer desde que saltara a la fama en 2007 por el reality televisivo de su familia, un programa sobre el día a día de las cuatro hermanas (Kylie, Kim, Kourtney y Kendall), su madre Kris Jenner.
A pesar de que la carrera de Kim Kardashian se consolidase con la llegada del programa televisivo que da cobertura a todo tipo de situaciones acontecidas en la familia Kardashian-Jenner, la mayor de las cuatro hermanas comenzó sus andaduras mucho antes, como estilista de Paris Hilton (39) y por la filtración de un vídeo de contenido sexual junto al cantante Ray-J.
Cuando ya figuraba como una de las celebridades del país, decidió emprender en el ámbito empresarial, lanzando firmas de belleza como su línea de ropa Skims, KKW Fragances o KWW Beauty, valorada según Forbes, de la que fue portada en 2016 como una de las empresarias más relevantes del mundo, en 900 millones de dólares.
Del ámbito empresarial pasó a matricularse en derecho en 2018 para involucrarse en cuestiones de índole política como la reforma en el sistema carcelario de Estados Unidos, llegando a reunirse con el presidente Donald Trump (74) en varias ocasiones, apoyada por su marido, el rapero Kanye West (43), con quien se casó en 2014 y con quien tiene cuatro hijos (Northt, Saint, Chicago, y Palm West).
La mayor del clan cumple este lunes cuarenta años y, como no podía ser de otra forma, lo hace sin bajar el listón de sus anteriores celebraciones, marcadas por fiestas en su mansión en Palm Springs, con mobiliario y decoración personalizadas y diferentes kits de fiesta para cada invitado, entre los que se encontraban rostros como Adele (32) o Emma Stone (31).
Hace dos días, Kardashian publicaba imágenes saliendo de una tarta de cumpleaños gigante, y anunciaba que el día de su cumpleaños sería también el del lanzamiento de su nueva línea de maquillaje en KKW Beauty, que se publicaría a las 10:46, su hora de nacimiento, haciendo, una vez más, de la combinación entre proyectos y vida personal su receta particular del éxito.
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