Los prestigiosos diseñadores de la firma Dolce & Gabbana, Domenico (62 años) y Stefano (58), han conseguido vender su pequeño y exclusivo refugio -desde la década de los 90- en el archipiélago eolio de Sicilia, Stromboli. El que fuera el escenario de las fiestas más glamurosas y veraniegas de la antigua pareja acaba de ser adjudicada por la agencia inmobiliaria Lionard Luxuary Real State, por seis millones de euros, tras salir a la venta en 2019 por seis millones y medio.
La conocida y transitada vivienda está localizada en la cima de un acantilando con vistas a la tranquilidad del mar Tirreno, el islote de Strombolicchio y al propio volcán en activo de la isla italiana, siendo este matiz uno de sus mayores atractivos.
Está conformada por más de 500 metros cuadros repartidos -fruto de fusionar tres viviendas de la zona- entre el interior de la vivienda y los impresionantes jardines que la rodean donde crece la típica vegetación del Mediterráneo. En concreto, el interior cuenta con 230 metros cuadrados, mientras que el jardín cuenta con, aproximadamente, 300 metros cuadros.
La fachada del edificio sigue el propio estilo mediterráneo, con paredes blancas, que contrastan con las tonalidades oscuras de la rocas volcánicas de la costa. Un aspecto que, sin ninguna duda, contrasta con la decoración interior de la casa de estos prestigiosos y reconocidos diseñadores.
En el interior del edificio, el color y los estampados se convierten en el claro protagonista de cada una de las estancias que la conforman. La villa cuenta con siete habitaciones. En cada una de ellas, reina una tonalidad cromática distinta. Desde potentes pinturas amarillas hasta apagados verdes, destacan en las paredes de cada una de las estancias. En especial, llama la atención dos estancias concretas.
En primer lugar, el comedor decorado con azulejos de cerámica de la propia villa, con los muebles a juego, y la habitación azulada que recuerda a la estancia donde Roberto Rosellini e Ingrid Bergman rodaron la película Strómboli, tierra de Dios. Inspiración que se confirma con el cartel del largometraje en la pared.
Habitaciones donde destacan las vigas de madera, los azulejos, el uso de muebles antiguos, telas rústicas y elementos decorativos típicos de la artesanía local cuya inspiración destaca, también, en sus colecciones. De hecho, en 2014, la isla sirvió de escenario en una de sus campañas publicitarias del perfume de su firma protagonizado por Colin Farell (44 años).
Los jardines de la vivienda también son dignos de ser mencionados, más que por albergar impresionantes fiestas veraniegas con múltiples rostros conocidos, por la vegetación propia de la villa que contrasta con las laderas de ceniza, propias del volcán, de la isla siciliana.
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