La actriz acudió a apoyar a Michael Douglas -nominado por El método Kominsky- y aunque el actor no se llevó el Emmy, su mujer sí se llevó el premio a la más elegante de la noche, brillando como solo ella sabe hacerlo con un impresionante vestido burdeos palabra de honor de Christina Ottaviano con una impresionante abertura frontal con la que presumió de piernas.