Mantener relaciones íntimas para "mejorar la química" entre actores fue el recurso que el productor de cine Robert Evans utilizó para la película Sliver (1993). Así lo ha revelado Sharon Stone (66 años), quien ha asegurado que fue obligada a acostarse con su compañero de reparto, Billy Baldwin (61), en el rodaje de la película.
La reconocida actriz ya reveló este episodio hace tres años en sus memorias, The Beauty of Living Twice. Sin embargo, ha sido ahora cuando ha puesto nombre al actor con el que fue obligada a mantener relaciones íntimas. Lo ha hecho en el último episodio de The Louis Theroux Podcast, publicado este martes, 12 de marzo, en plena resaca de los Premios Oscar.
Los hechos ocurrieron en el rodaje de Sliver, película dirigida por Phillip Noyce en 1993, en la que Stone encarna el papel de Carly Norris, una editora de libros que, tras divorciarse, se traslada a vivir a un lujoso edificio de Nueva York, donde se han producido varios accidentes mortales rodeados de misterio. Entre los vecinos de la protagonista se encuentra el joven Zeke Hawkins, interpretado por Billy Baldwin.
"Va corriendo por su despacho con gafas de sol explicándome que se acostó con Ava Gardner y que yo debería acostarme con Billy Baldwin, porque si me acostaba con Billy Baldwin, su interpretación mejoraría", recuerda Stone en el pódcast sobre una reunión con Evans, fallecido en 2019 a los 89 años y productor de películas tan emblemáticas como Love Story y El Padrino.
La actriz asegura que el productor de la cinta aseguró que "necesitábamos que Billy mejorara en la película porque ese era el problema. Si pudiera acostarme con Billy, tendríamos química en la pantalla, y si me acostaba con él, eso salvaría la película".
Según Evans, "el verdadero problema en la película" era Stone, porque "era tan estirada y tan poco parecida a una actriz de verdad que sólo podía follar con él y encarrilar las cosas". La actriz aseguró que su "trabajo era actuar y así lo dije". "No fue una respuesta popular. Me consideraban difícil", desvela en sus memorias.
Sliver era la primera película de Stone tras el éxito de taquilla de Instinto básico. "No tenía que follarme a Michael Douglas. Michael podía venir a trabajar y saber cómo dar esos golpes, y hacer esa línea, y ensayar y presentarse. Ahora, de repente, estoy en el negocio de 'tengo que follarme a la gente'", asegura.
Este no es el primer episodio de abuso al que se ha enfrentado Stone. La actriz reveló el año pasado en el pódcast Let's Talk Off Camera de Kelly Ripa que fue acosada por un antiguo ejecutivo de Sony que se sacó el pene cuando ella acudió a su despacho para una reunión en los años 80.
Además, la intérprete admitió que a lo largo de su carrera como actriz ha tenido que lidiar con los abusos de hombres en el poder, incluido el "cerdo" Harvey Weinstein. "Se sentía muy cómodo lanzándome al otro lado de la habitación cuando se enfadaba conmigo porque no hacía lo que él quería", dijo.
La amenazante respuesta de Billy Baldwin
Tras la confesión de Stone, Baldwin ha publicado un mensaje en su cuenta de X (antes Twitter), en el que no duda en amenazar a la actriz: "¿No estoy seguro de por qué Sharon Stone sigue hablando de mí todos estos años después? ¿Sigue enamorada de mí o todavía está dolida después de todos estos años porque rechacé sus insinuaciones?".
El actor también hace referencia a una conversación que la actriz habría tenido con la modelo Janice Dickinson el día después del casting de la película, cuando los tres se cruzaron en el avión de regreso a Nueva York. "Le dijo: 'Voy a hacer que se enamore tanto de mí que su cabeza va a quedar dando vueltas'".
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Baldwin no duda en lanzar una amenaza a Stone: "Tengo tantos trapos sucios sobre ella que le haría girar la cabeza, pero me he callado". Además, revela que mantuvo una reunión con Evans "implorándole que me permitiera coreografiar la escena íntima" para "no tener que besar a Sharon". "Es una leyenda absoluta. Me pregunto si debería escribir un libro y contar las muchas, muchas historias perturbadoras, pervertidas y poco profesionales sobre Sharon. Podría ser divertido", termina diciendo.