Este pasado fin de semana, la industria cinematográfica lloraba el triste fallecimiento de la actriz Shannen Doherty a los 53 años. Fue su representante la que, a través de un comunicado, anunciaba la pérdida de una de las actrices más queridas por sus papeles en Embrujadas y Sensación de vivir.
Fue en marzo de 2015 cuando le detectaron por primera vez un cáncer mama y desde entonces no dejó de luchar contra la enfermedad. El pasado año anunció que se le había extendido al cerebro.
A la par que se enfrentaba a su cáncer, también tuvo que atravesar en el último año una dolorosa ruptura tras más de una década de matrimonio junto a Kurt Iswarienko (49 años). Fue una época difícil en la que tuvo que luchar para llegar a un acuerdo de divorcio para que su exmarido le pagara una pensión conyugal y oficializar todo.
Fue este lunes, 15 de julio, cuando la revista People confirmó que la expareja llegó a un acuerdo un día antes de su fallecimiento. Según los documentos judiciales obtenidos por el medio, la actriz firmó una solicitud para renunciar a la manutención conyugal el 12 de julio. Iswarienko selló esos mismos papeles 24 horas después, el mismo día en el que moriría la querida actriz.
En este acuerdo, también se aceptó la "disolución" de su matrimonio, que se había prolongado de manera oficial desde 2011 a 2023, cuando decidieron separar para siempre sus caminos. De esta manera, quedó plasmado en papel su separación sin tener que llegar a los tribunales.
"Las partes han celebrado un acuerdo escrito sobre sus bienes y sus derechos matrimoniales o de pareja de hecho, incluida la manutención, cuyo original está siendo o ha sido presentado al tribunal", explican los documentos a los que ha tenido acceso la citada publicación.
Shannen llegó a solicitar al fotógrafo una manutención conyugal de 15.434 dólares al mes, además de contribuir en honorarios y costes de su abogado. Ante los silencios de Iswarienko, la actriz llegó a señalar a varios medios que su expareja "estaría retrasando el proceso de separación hasta que falleciera". "No está bien que a Kurt se le permita prolongar nuestro divorcio con la esperanza de que yo muera antes de que él tenga que pagarme, mientras él continúa viviendo su vida y eludiendo sus responsabilidades hacia su esposa moribunda durante más de 11 años", defendió la intérprete en unos documentos obtenidos por la revista People el pasado 20 de junio.
La pareja no llegó a tener hijos, a pesar del comentado deseo de la intérprete por ser madre. Eran conocidas las ganas de Shannen, tanto que llegó a afirmar que estaba sometiéndose a un tratamiento para poder tener un hijo. De hecho, en 2017 rechazó tomar medicamentos contra el cáncer porque esto podía suponerle un grave impedimento para poder quedarse embarazada.