El cuerpo del fallecido cantante británico Liam Payne ha sido trasladado en Buenos Aires al lugar donde va a ser embalsamado para después enviarlo a Londres, donde está previsto celebrar su funeral, probablemente esta semana, tal y como han informado diversos medios en las últimas horas.
Una fuente ha confirmado al medio estadounidense Us Weekly que los restos de Payne serán trasladados al Cementerio Británico en Chacarita, el camposanto más grande de Buenos Aires, para "comenzar el proceso de embalsamamiento y preservar el cuerpo para el viaje de regreso" a Londres, donde se realizará su funeral.
La misa de despedida del exmiembro de One Direction se llevará a cabo en la Catedral de San Pablo de la capital británica y luego será sepultado, según este medio.
La fuente también ha señalado que el proceso de embalsamamiento "podría durar unas 48 horas", lo que significa que el padre de Liam, Geoff Payne, que se encuentra en Argentina desde que se produjo el fallecimiento de su hijo, podría regresar al Reino Unido con el cuerpo esta semana.
Según el diario argentino La Nación, que cita fuentes judiciales, Geoff Payne logró repatriar el cuerpo de su hijo después de dos semanas de trámites burocráticos. Cuando el padre del cantante llegó a Argentina, se le informó de que llevarlo de regreso a Reino Unido podía demorar entre cuatro y cinco días, pero por las circunstancias de su muerte el trámite duró más de lo esperado.
Liam Payne cayó desde el balcón de la habitación en la que se alojaba del hotel CasaSur, en el barrio capitalino de Palermo el pasado 16 de octubre y falleció en el acto. El informe preliminar de la autopsia concluyó que la causa de la muerte del cantante, de 31 años, fue un "politraumatismo y una hemorragia interna y externa".
La Fiscalía presumía que "el músico se encontraba a solas cuando ocurrió la caída y atravesando algún tipo de brote producto por el abuso de sustancias". También informó de que se encontraron en la habitación sustancias que acreditarían "una situación previa de consumo de alcohol y estupefacientes".
Los primeros datos de la autopsia revelan que había varias sustancias en su organismo. Entre ellas, el éxtasis, crack, ketamina y una mezcla de drogas conocida como "cocaína rosa".
Las pruebas de toxicología revelaron además que había "cristal" en su sangre, la versión argentina de la metanfetamina. Según sus fuentes, la Policía encontró una botella de alcohol en la habitación del artista, así como medicamentos recetados contra la ansiedad.
Fotos de la habitación del hotel en el barrio de Palermo desde donde cayó el artista, y que publicó TMZ, muestran la pantalla del televisor destrozada, un polvo blanco sobre una mesa y diverso instrumental relacionado aparentemente con las drogas.
Tras el deceso, la familia del cantante emitió un desgarrador comunicado, que rezaba así: "Estamos desconsolados. Liam vivirá para siempre en nuestros corazones y lo recordaremos por su alma amable, divertida y valiente. Nos estamos apoyando mutuamente lo mejor que podemos como familia y pedimos privacidad y espacio en este terrible momento".