Va a ser lo más dulce que veas hoy: la tierna imagen de este bebé descubriendo a su madre por primera vez. Lo ha hecho gracias a unas gafas especiales para su enfermedad, llamada Albinismo Oculocutáneo que afecta al color de la piel, los ojos y el pelo.
Su padre ha explicado que el pequeño Leopold ahora es capaz de ver el mundo de una forma clara por primera vez gracias a unas gafas especiales que están hechas de un material similar al caucho: sin tornillos, bisagras ni bordes afilados.
El bebé se enfrentaba por primera vez al mundo tras estrenar gafas nuevas. Y así lo demuestra en estas imágenes que están circulando por la red y que muestran la alegría del pequeño al reconocer la imagen de su madre.
El vídeo fue grabado en Seattle por su padre, que confesó al Daily Mail la emoción que sintió al ver a su hijo sonreír. "Tuve algunos problemas para sostener la cámara porque estaba llorando muchísimo".