Novias, pasión por una costura de largo recorrido

En la pasarela Atelier Couture se han visto vestidos de novias en líneas románticas, cuajados de detalles artesanos y minuciosos, en trajes de una o dos piezas, que impulsan a la mujer como protagonista en el altar con piezas de largo recorrido.

Los diseñadores han presentado propuestas versátiles con un nexo común, la 'pasión por la costura', que otorga "visibilidad" a oficios artesanos que resurgen, como explica Susana Vela, directora de esta pasarela de novias.

Uno de los diseños románticos de Atelier Couture.

El Palacio de Fernán Nuñez de Madrid ha sido el escenario del desfile, en la quinta edición de Atelier Couture, con las propuestas para 2020, que se ha abierto con la costura delicada y preciosista de Hannibal Laguna, que ha cubierto a las novias con ornamentos de flores, plumas y cristal, en vestidos vaporosos y bordados en alta definición.

"¡Las novias han cambiado tanto! Pero hay una tradición que permanece, el secreto mejor guardado hasta el último minuto: su vestido", cuenta el diseñador sobre su colección Divine Secret, "romántica, con clásicos renovados", confeccionada con gasa, crepé y organzas y cuerpos de cinturas entalladas.

Algunos escotes en V caen hasta la cintura, atrevidos, pero sutilmente recatados al quedar unidos por un tul casi invisible. "Hay un equilibrio entre la sensualidad y el romanticismo", explica el diseñador, que en algunos vestidos cubre los brazos con gasa y deja, en otros, la espalda al descubierto.

Delicados bordados con juegos en mate y brillo y cuerpos con mucha luz dan el protagonismo a una mujer que "quiere ir divina el día de su boda", pero que también apuesta por volver a reutilizar su traje en un día de fiesta, como en el caso de un pantalón con enorme lazada o un vestido con cuerpo de bodi en pedrería.

Dirigida a una mujer que prefiere "un clasicismo roquero muy alejado de la ñoñería", Rafael Urquízar ha presentado una colección con tejidos de red y cinturones con tachuelas, con la particularidad de que las diademas no las sitúa a modo de corona sino de cresta sobre el cabello.

Los tonos marfil derivan hacia el tostado en siluetas muy estructuradas, pero también en "vestidos camiseros sencillos con mucha caída", comenta el diseñador malagueño, que también ha mostrado creaciones de estilo art decó actualizadas en "gazares" de seda natural y encajes laminados en oro trabajados haciendo líneas, una de sus mejores propuestas.

Urquízar ha creado vestidos abrigo para novias que prefieren el invierno, camisolas con pantalón, blusas y faldas largas para mujeres que apuestan por un dos piezas y que piensan en la posibilidad de "una segunda puesta".

Pensando en esa "mujer práctica" que no busca un vestido de novia para un solo día, Raquel López propone líneas limpias y "muy cómodas", con tejidos fluidos a los que incorpora bordados artesanales de orquídeas pintadas a mano.

Antonia Serena vuelve a hacer de la artesanía de su costura su principal baza para vestir a una novia "versátil, con carácter propio y diseños atemporales", explica la barcelonesa.

Una colección en la que combina vestidos y dos piezas en estilismos en los que no faltan pantalones, monos y chaquetas que acompañan vestidos de "líneas suaves y minimalistas".

La granadina Eliz Smis concentra en el binomio blanco y negro sus propuestas. "Para mí los dos representan la pureza", ha explicado la diseñadora, quien presenta un vestido en azabache sobre tul, apuesta por una novia con minifalda y deja que una inocente bata de cristianar inspire uno de sus diseños.

El dúo creativo tinerfeño Amarca, formado por Sergio López e Itahisa García, dibuja a una novia con mucho volumen en tul de seda, con mangas abullonadas, bordados artesanales y "sutiles transparencias".

El dúo de diseñadores tinerfeños Amarca, con una de sus 'novias'.

Mujeres "inspiradoras de la historias", como Emilia Pardo Bazán o Marie Curie, son las que vertebran la colección de la diseñadora gallega Raquel Ferreiro, que ha presentado vestidos que potencian la silueta femenina.

Matilde Cano tiene en sus hijas, Olga y Marisa, dos dignas sucesoras, y trasladan a una colección de fiesta la luz de Córdoba en los colores. Vestidos con una gran riqueza en los bordados y estampados muy característicos de la firma.

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