El coronavirus está afectando gravemente al sector nupcial, especialmente a todas las parejas que tenían planeado contraer matrimonio este año. Las novias que querían casarse en 2020 están pasando por momentos de incertidumbre, dudas, miedos e inseguridades, y muchas de ellas están aplazando sus bodas a 2021, conscientes de los trastornos que eso supone: modificaciones en el vestido de novia, cambios de fecha en las invitaciones, alteraciones en la organización con los proveedores, etc.
Una de las mayores preocupaciones de las novias es cómo podrán transformar su vestido en caso de necesitarlo; y desde Laura Escribano Atelier han compartido las soluciones y las claves para transformar un vestido de novia. En este sentido, uno de los aspectos que más afectará en cómo se debe adaptar el vestido es la fecha a la que se ha desplazado la boda.
1. Otoño 2020. El vestido no se modificaría mucho ya que hablamos de diseños de entretiempo, lo que más afecta es cambiar una fecha de verano a una de invierno.
2. Invierno 2021. En este caso, si cambia de primavera o verano a invierno de 2021, tendríamos que añadir algún tipo de prenda más o modificar algunos tejidos del vestido original.
3. Primavera 2021. De primavera a primavera no hay ningún problema.
4. Verano 2021. De primavera a verano, quitaríamos alguna capa. Los vestidos pensados para primavera no tienen gran conflicto de adaptación a otras estaciones.
5. Otoño 2021. De verano a otoño, en este caso sí que tendríamos que buscar algún soporte, por ejemplo unas mangas, y revisar un poco los tejidos.
"Es más conflictivo mover la boda de verano a invierno que de invierno a verano en cuanto a diseño de vestido y look se refiere. Es importante tener en cuenta que todos estos puntos dependen también de dónde te cases. Por ejemplo, no es lo mismo casarse en las Islas Canarias que en Madrid. Las islas cuentan con un clima mucho más suave que la capital, es decir, no hay un cambio tan brusco de temperatura entre estaciones", ha explicado Laura Escribano.
¿Cómo transformar el vestido de novia?
1. El dónde y el cuándo. En primer lugar, hay que saber y estudiar dónde y cuándo se va a celebrar la boda. En caso de que afecte al dónde y al cuándo, a partir de aquí se realiza un análisis del vestido de novia y se ofrece una propuesta personalizada a cada clienta.
2. El tejido, que se cambia, se añade o se quita. Se puede optar por un tejido más liviano o más grueso dependiendo del cambio de fecha y lugar, se quita tejido en caso de trasladar la boda de invierno a verano y se añade en caso de pasar de verano a invierno.
3. Los componentes del vestido, como las mangas, los puños o los escotes. Es muy importante saber hacia dónde se va a trasladar la boda. Dependiendo de este factor, se deberían modificar estas tres partes del vestido.
4. Complementos, del tipo boleros, capas, abrigos o chaquetas. Es decir, se pueden agregar prendas extra si la boda se traslada de primavera o verano a invierno.
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