Decir que este año ha sido atípico, se queda corto. Los vaivenes emocionales que se han vivido han tenido sus consecuencias a nivel beauty. Seguramente habrás percibido una aparición repentina de acné -independientemente de la edad que se tenga-, un aumento de las rojizas irritaciones cutáneas o, simplemente, padecer el rostro más seco (consecuencia provocada por el estrés que provoca que los nutrientes del cuerpo se trasladen a otros músculos y a la evaporación de lípidos) o flácido (consecuencia de la escasez de nutrientes en un cuerpo). Por eso mismo, más que nunca, es importante sacar unos minutos de la rutina de tu día a día o de la semana: para cuidar y mimar tu rostro.
Seguro que en un cajón de la cómoda del baño o en un pequeño armario tienes alguna mascarilla medio empezada o alguna crema olvidada. ¡Date un capricho, pero de verdad! Tomate tu tiempo, una pausa en medio del estrés y el agobio de los quéhaceres diarios, y disfruta de algún tratamiento especializado para el rostro.
Hoy en día, existe una amplia variedad de protocolos faciales que se adecúan a tus necesidades y, lo mejor de todo, es la efectividad que presentan. En una sesión ya se ven los resultados y la mejora del estado del cutis. Por eso, es un pequeña pausa o un ligero mimo, algo que no requiere de una continuidad o de realizar un número determinado de sesiones para ver los resultados.
Tratamientos cutáneos
Hay un amplio catálogo de protocolos y empresas especializadas en este tipo de tratamientos; tan solo tienes que encontrar uno que se ajuste a lo que buscas o te llame la atención.
Por ejemplo, en el centro de belleza 'The Secret Lab' hay decenas de tratamientos. Destacar dos. En primer lugar, el Cellular Massages 4D, que revitaliza y rejuvenece la salud celular del cutis combinando las maniobras de lifting facial japonés con la acupuntura estética y un delicado masaje. Con ello, se elevan los pómulos y las cejas, se suavizan las bolsas de los ojos y, también, se redefine el cuello y la frente. Tiene una duración aproximada de 90 minutos.
Y, en segundo lugar, destacar el llamado: Citrus is what I need, con el que conseguirás una piel fresca, hidratada y luminosa gracias a la acción de la vitamina C. Tiene una duración, aproximada, de 60 minutos. En este tiempo limpian el cutis, lo exfolian, realizan un masaje drenante y reafirmante y, por último, aplican una mascarilla rica en esta vitamina.
Remedios caseros
Si, por algún casual, eres reacia a acudir a estos sitios: tranquilidad, hay una extensa variedad de cremas o tratamientos para aplicar desde la comodidad de tu salón.
Desde las mascarillas de un solo uso de tres euros del Mercadona, hasta cremas con un valor económico más alto. Todo vale, dependiendo de qué efectos o duración estés buscando. O, incluso, si no tienes tiempo puedes optar por aplicar un tratamiento facial antes de dormir y dejarla actuar toda la noche.
En este último campo, puede destacar la mascarilla antiedad de Fridda Dorsch, llamada Mascarilla Antiedad de vitamina C, que ayuda a minimizar el aspecto de los poros del rostro y reafirman la piel. Lo curioso de esta mascarilla es que, aunque tiene un uso recomendado de 20 minutos, si perduras con ella toda la noche tendrás una tez iluminada y tersa; intensificas su efecto.
[Más información: ¡Di adiós a las arrugas del rostro! Anota estos consejos y productos para prevenir su aparición]