La industria de la moda se ha visto afectada por la crisis del coronavirus. Los últimos meses el sector ha experimentado fuertes cambios. No solo a nivel empresarial, sino también en cuanto a ventas se refiere. Sin embargo, en enero ocurrió un curioso fenómeno con tres bolsos de Hermès, cuya demanda se ha disparado dentro del mercado de segunda mano. Así lo explica Lyst, el mayor buscador de artículos de moda del mundo, que analiza las búsquedas, visualizaciones de páginas y métricas de ventas de los últimos meses
De acuerdo con la plataforma de moda, las búsquedas de Hermès de productos segunda mano aumentaron en Lyst un 430% en comparación con el mismo período del año anterior. En concreto, con tres de los modelos más icónicos de la casa francesa: el Birkin, el Kelly y el Constance.
Este fenómeno tiene ver con la revalorización que han experimentado los bolsos de lujo en el mercado de segunda mano. En plena pandemia, este complemento se ha convertido en una de las mejores formas de invertir por ser una pieza que está ligada al estatus. Así, en los últimos meses, lo más inteligente ha sido apostar por prendas clásicas y atemporales que, si bien forman parte de reconocidas casas de moda, al no ser de estreno tienen un valor menor.
Una de estas piezas es el clásico Birkin de Hermès, el bolso que nació en 1984 durante un vuelo de París a Londres. Entonces, la actriz inglesa Jane Birkin se lamentaba junto al gerente de Hermès, Jean-Louis Dumas, por no encontrar un cabás adaptado a sus necesidades de madre primeriza. Inmediatamente, el creativo dibujó un bolso de viaje rectangular, flexible y amplio, con un canto bruñido y pespuntes de guarnicionero. Hoy, 37 años después, es uno los iconos de la casa francesa. Puede llegar a alcanzar los 120.000 euros y ocupa un lugar privilegiado en los armarios de reconocidas celebridades como Georgina Rodríguez (27), Victoria Beckham (46) o Sarah Jessica Parker (55).
El modelo Kelly es otro de los complementos de Hermès que está siendo altamente demandado en el mercado de segunda mano. Su historia se remonta a los años 30, cuando Robert Dumas, yerno de Émile Hermès y su sucesor como director de la marca, creó un bolso con correas para mujer, que posicionaba a la firma en la era del atrevimiento y el modernismo. Sin embargo, su gran éxito llegó dos décadas después. A finales de los años 50, Grace Kelly, estrella de Hollywood y princesa de Mónaco, fue fotografiada con esta pieza, ocultando los primeros indicios de su embarazo. De ahí que el artículo adoptara su nombre definitivo y adquiriera fama internacional.
El Constance, por su parte, otro de los más buscados en el mercado de segunda mano, refleja, según la página web de Hermès, "fidelidad a uno mismo, perseverancia y confianza". Todos estos, valores que se adhieren a la filosofía de esta firma de lujo. Su historia es más reciente que el Kelly, ya que data de 1967, cuando Jean-Louis Dumas encargó el dibujo de un bolso para la marca a una joven que seguía la moda de la época. Como la diseñadora estaba embarazada decidió ponerle al bolso el nombre de su hija: Constance. Esta pieza destaca por su estilo urbano, deportivo, práctico y desenfadado, adaptado a aquellas mujeres que llevan un estilo de vida acelerado. Al igual que los otros dos, llama la atención por ser atemporal y elegante.
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