No hay remedio mágico que haga eliminar la piel de naranja. Cualquier crema, masaje o tratamiento solo la ocultará por un tiempo. Sin embargo, '180 the concept nutricosmética' descubre las claves para combatir y mejorar este molesto problema estético que puede llegar a acomplejar con la llegada del verano, cuando toca lucir piernas.
¿Piel de naranja o celulitis?
No, no es lo mismo aunque normalmente se emplee como sinónimo. La llamada 'piel de naranja' se produce como consecuencia de la acumulación del tejido graso subcutáneo entre las celdillas de colágeno. Esto provoca que se desestructure y se comiencen a observar, sobre la dermis, una red de pequeños bultos similar a la piel de esta fruta. Tal y como confirma la experta Gema Cabañero, "la piel de naranja por glicación (es decir la reacción del azúcar con el colágeno y la elastina) no es celulitis propiamente dicha ya que no compete a la grasa, sino al colágeno".
Causas de su aparición
La piel de naranja se produce por glicación, un proceso interno por el que los azúcares se adhieren a las fibras de colágeno, provocando su deterioro: pierden fuerza, se desorganizan y llegan a desestructurarse. La reacción química por excesiva adherencia de azúcar provoca microabultamientos muy similares a la vista a los de piel de naranja por crecimiento irregular de los adipocitos y la desestructuración del colágeno. "Esto es, además, el origen de otros síntomas externos relacionados con la estética facial y corporal, como menos elasticidad de los tejidos, flacidez o propensión a estrías", advierte la experta.
Sin embargo, la aparición de piel de naranja depende de otros factores, algunos que no podemos evitar, como es la genética. También tiene que ver el género, por la diferente disposición de los septos fibrosos en el sexo femenino y masculino. Además, las mujeres tienen más tendencia ya que "acumulan más grasa en ciertas zonas debido a su sistema hormonal y a que su red de tejido conjuntivo es más frágil, con lo que la piel de naranja se forma más fácilmente", afirman desde la firma de nutricosmética avanzada.
Por otro lado, la edad también es un factor a tener en cuenta, ya que "la piel de naranja comienza a formarse desde la adolescencia, aunque se hace más visible después de esta, que es cuando se ralentiza el metabolismo y la vida se hace más sedentaria".
Así frenarás su aparición
La piel de naranja exige vías de tratamiento muy diferenciadas, sin embargo, hay ciertos hábitos que pueden ayudar a reducirla:
Brushing. "Para favorecer el flujo sanguíneo y mejorar la circulación es muy recomendable realizarse un masaje corporal con un cepillo específico antes de meterse a la ducha", recomiendan desde '180 the concept'.
Además, es importante exfoliar la piel bajo la ducha un par de veces a la semana con productos que posean ingredientes drenantes. "Después, debemos aclarar con agua fría y realizar un suave masaje de movimientos circulares desde abajo hasta arriba con una crema específica para la piel de naranja".
Bye, bye sedentarismo. Uno de los factores clave es la mala circulación y la insuficiencia linfática consecuencia del sedentarismo, que provoca que el sistema funcione lentamente, estimulando su aparición. Para ello, se recomienda hacer ejercicio de manera regular y continuada. Asimismo, no se aconseja permanecer sentado más de dos horas seguida; haz pequeñas pausas para levantarte y estirar las piernas, reactivarás la circulación.
Nutricosmética. Trabajar desde dentro con suplementos orales es fundamental para mejorar la circulación y luchar contra la retención de líquidos, estimulando el metabolismo y reduciendo los depósitos grasos en el organismo gracias a ingredientes cuidados que favorecen el desarrollo de la masa muscular y la producción de colágeno de calidad.
Nada de harina ni azúcares refinados. Llevar una dieta sana y equilibrada es esencial para el buen funcionamiento del organismo. Debemos reducir el consumo de sal, decir adiós a las harinas y a los azúcares refinados, ya que con estos sencillos hábitos se reduce la acumulación de toxinas y, por consiguiente, la aparición de la piel de naranja.
Bebe mucha agua y evita los refrescos (incluso los light). Es importante estar hidratado para depurar el organismo y eliminar toxinas. Como mínimo se debe beber alrededor de litro y medio de agua al día, aunque, añade, "esto dependerá de nuestro peso, estatura y del ejercicio que hayamos realizado". Además, evita los refrescos, incluso los que dicen ser light contienen edulcorantes artificiales nada recomendables para nuestro objetivo.
[Más información: Sérum: cómo aplicarlo para brindar al rostro todas sus propiedades]]