El museo dedicado a los diseñadores Victorio & Lucchino en Palma del Río (Córdoba) abrirá en la segunda quincena de abril, a expensas de agendas oficiales, tras más de una década de conversaciones y trabajos. El museo se ha instalado en el antiguo convento de Santa Clara, una edificación del siglo XVI, recuperado como espacio cultural y declarado Bien de Interés Cultural en 1982.
La exposición de Victorio & Lucchino, en la que se rotarán las 2.000 piezas de su donación en lo que eran las celdas donde habitaban las monjas franciscanas hasta 1970, se extiende en siete salas.
Sobre un proyecto museográfico de NEXO, una Unión Temporal de Empresas formada por Blank Exhibitions y Proasur, la instalación aspira a ser un "museo vivo, dinámico, interactivo y sensorial y propone en su desarrollo una experiencia inmersiva y multisensorial que explora la temática del diseño y la moda en todos los sentidos".
El espacio, vetado a las cámaras hasta su apertura, además de mostrar sus trabajos, concibe "las distintas salas como un hilo conductor de lo que es el mundo de la moda, desde el comienzo, la idea, hasta lo que es la puesta en escena en la pasarela", ha señalado a EFE la concejala Desarrollo Económico, Cultura y Turismo, Ana Belén Corredera (PSOE). La alcaldesa entiende, según aseguró a EFE, que será "el tercer museo de la moda" de España, tras el estatal de Madrid y el Balenciaga, de Guetaria.
De hecho, en la propuesta de NEXO, que ha sido facilitada a EFE, se preveía respetar "al máximo las características del espacio, diseñando soluciones que no ocultan el edificio, materiales y acabados que encajan bien en el ambiente del convento y reducen la intervención al mínimo de interferencias con el mismo".
A lo largo de ellas, adaptadas a discapacidades visuales y físicas, se exhibirá "un rico legado que representan una forma de vivir, de vestir, de ser Andalucía a través de la moda", señaló Caro de la Barrera, para quien "estos dos grandes diseñadores son una marca que nos ha posicionado en muchísimos países".
En la primera de las salas, explica Ana Belén Corredera, "Santa Clara: paseo histórico por un convento recuperado", "se presenta el edificio, con todas las vicisitudes históricas que han acontecido entre sus muros", algo así como "el propio edificio recibiendo a los visitantes".
Aún en la planta baja, en la sala 'Victorio & Lucchino: el atelier de los sueños', "los diseñadores nos muestran lo que es el proceso creativo desde el comienzo hasta el final, desde la creación del boceto hasta el diseño sobre la modelo, en el que en algunos casos van a tener la suerte de poder tocar", apunta la responsable municipal.
Después se pasa a la sala de collage para conocer las más destacadas portadas de la historia de Victorio & Lucchino, "en donde las grandes modelos mundiales visten sus creaciones".
En la planta superior hay tres salas. En 'Alegría de vivir: De Andalucía al mundo', "están las creaciones más de día, el pret a porter, con mucho color y alegría", precisa Corredera; en 'Novias universales' "se representa una pasarela de ida y de vuelta con distintos espejos con los que se podrán disfrutar desde diferentes ángulos las creaciones, algunos icónicos y muy reconocibles, y la última con prendas es 'Estrellas en la noche', en la que se enseñan la moda de noche y los trajes de gala".
En el coro alto del convenio se presentan los complementos, desde bolsos a joyería y, como final del recorrido, se reproduce el backstage, "donde se hacen los últimos preparativos para salir a una pasarela virtual de los últimos veinte años en la que los diseñadores dan el agradecimiento por haber realizado el recorrido", resume la concejala.
"Sabemos muy bien cuáles son las señas de identidad de estos grandes diseñadores y para Palma es un honor que hayan elegido la ciudad natal de José Víctor para mostrar al mundo una gran colección", reconoce la alcaldesa, que cierra un proceso que comenzó su antecesor, José Antonio Ruiz Almenara, y que en noviembre de 2017 tuvo su punto de inflexión con la firma del acuerdo entre los diseñadores y el Ayuntamiento de Palma del Río.
Entonces se llevaba ya media década consumida "hilando como en un tapiz", según definió el proceso la entonces "simple ciudadana", como se calificó Carmen Calvo, en aquel momento diputada nacional por Córdoba y dos años después vicepresidenta primera del Gobierno, cuya participación en las conversaciones fue esencial.
El proyecto ha dispuesto de un presupuesto de más de un millón de euros, con 819.175 euros de financiación municipal y 200.000 de la Diputación de Córdoba.
[Más información: Victorio y Lucchino, la historia del ascenso y la caída de los diseñadores]