Molly Bracken ha presentado su nueva colección primavera-verano en su showroom de Madrid, hasta donde se desplazó EL ESPAÑOL el pasado 26 de enero para conocer de cerca todas las novedades, tanto de la firma cabecera como de su línea premium y su propuesta joven e infantil. En todas ellas prevalece el estilo vintage con aires retro que tanto han caracterizado a la empresa.
Al igual que la primavera pasada, esta vez Molly Bracken vuelve a apostar por los estampados. Las flores, las rayas y los corazones decoran un sinfín de piezas que también llaman la atención por sus colores vivos. El fucsia, el morado y el tono coral tienen gran presencia en esta nueva colección, en la que también hay una variedad de ropa en tonos tierra para las más tradicionales en su forma de vestir.
A estas prendas se suman las clásicas piezas blancas de aire boho, muy típicas de la temporada estival, así como una variedad de ropa confeccionada en tejido denim, muy habitual en los meses de primavera. Molly Bracken da el toque final a su nueva colección con una amplia gama de bolsos, ideados para todos los gustos y para llevar en la playa o la ciudad. La firma los ha confeccionado estilo shopper -estampados o básicos- y tipo bandolera para las que prefieren la comodidad.
[Femenina y con aire retro: así es la nueva colección de Molly Bracken]
Gabrielle, la parte premium de la marca, tiene un aire más glam. Tal y como pudo saber este periódico, está ideada para aquellas que suelen apuntarse a planes lujosos o de mayor prestigio en la temporada estival. En esta propuesta el blanco y los tonos tierra también tienen presencia, pero resaltan, sobre todo, los tejidos brillantes. Las lentejuelas adornan varios de los cojuntos de la firma.
Lili Sidonio, la propuesta adolescente y juvenil, mantiene su acento urbano con una serie de piezas en color morado, turquesa y naranja. No obstante, también guarda espacio para las más sencillas con prendas blancas y de tejido denim. Como complementos se han enfocado, sobre todo, en riñoneras multicolor y cómodas.
Esta primavera-verano, Molly Bracken también da espacio al sector infantil con una colección tierna a la vez que chic de Mini Molly. La firma, además, vuelve a rescatar las piezas comfy que se popularizaron durante el confinamiento, debido al teletrabajo. Esta propuesta se presenta, sobre todo, en colores pasteles y en piezas propias de andar por casa, de corte holgado y cómodas.